Víctima y vecinos interpusieron queja en Derechos Humanos

Ciudad Juárez.- Ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), vecinos de José Ángel Magaña Monge, la víctima de los agentes de la CES detenidos el miércoles y acusados de varios delitos, son testigos del origen del drama y del abuso policial. 

El primer visitador de la CEDH, Cesar Díaz Gutiérrez, dijo que antes de ser asesinado el afectado acudió junto con sus vecinos el pasado 4 de febrero a interponer una queja ante esa representación, para que se investigara el incidente de abuso policiaco. 

La queja se inició –dijo el funcionario– porque detuvieron a su hijo menor de edad y lo cargaron con droga. Además, refiere la persona afectada, el robo en su domicilio y el contenido de lo que captaron las cámaras de seguridad de su casa, indicó Díaz.

El primer visitador de la CEDH dijo que la queja sigue en curso, a pesar de que el afectado fue asesinado. 

Dijo que los vecinos aportaron su versión de los hechos, en el sentido de que el adolescente fue abordado sobre la calle por los elementos policiacos y observaron cuando lo metieron a su casa y los agentes detrás de él. 

Según se conoció por otras fuentes, los hechos sucedieron en la calle Tazmania de la colonia 16 de Septiembre, donde se concentraron cuatro de las unidades policiacas que tenían la leyenda fuerzas estatales. 

El incidente fue visto a plena luz del día, entre las 2:00 y 3:00 de la tarde del día 30 de enero del presente año. Los vecinos observaron 12 agentes encapuchados afuera del domicilio y cuatro de ellos ingresaron al domicilio, según se conoció. 

También dieron cuenta de que del interior del inmueble los estatales sacaron una camioneta F-150 color arena cargada con diversos enseres. 

Ese vehículo fue presentado por los policías que acusaron al hijo del propietario de la casa de poseer droga. 

En el señalamiento oficial los agentes aseguraban que el menor de edad fue detenido mientras circulaba en ese vehículo. 

El abogado de la familia, Saúl Trejo, dijo que el joven fue liberado inmediatamente, ya que ni siquiera sabía manejar y pudo demostrar ante el juez de menores infractores que el parte policial fue inventado.