Parte Benito a su nueva casa

La jirafa Benito emprendió su camino hacia Puebla la noche del domingo tras una serie de maniobras que el equipo de su nuevo hogar, el parque Africam Safari, realizó para el embarque del espécimen en una plataforma.

Para el trayecto, el contenedor fue acondicionado con dos cámaras de video y un transmisor de audio para poder hablarle a la jirafa en caso de ser necesario, además de que tiene disponible una cama de alfalfa que proporcionará calor; comida, agua y un techo que disminuirá el estímulo visual de Benito durante el trayecto, explicó Frank Camacho, director del parque poblano.

Añadió que el techo, además de ir cubierto, permitirá disminuir su altura de manera mecánica en caso de que en el trayecto se encuentren puentes muy bajos para la altura habitual de la estructura y de Benito, y así evitar cualquier accidente.

Entre sesiones de acondicionamiento con refuerzos positivos para que Benito relacione la caja con premios como zanahorias, la jirafa se acercó a los límites de su hábitat, donde decenas de juarenses le dieron el adiós ayer por la tarde.

Ya nadie le llevó zanahorias, y los pocos que sí eran conminados por los guardias de seguridad del Parque Central para que no se las dieran, además de que había un letrero que prohibía darle, aunque fueran sus favoritas, según otra infografía. 

El perímetro entero del hábitat se encontraba custwodiado por juarenses divididos en sus comentarios entre quienes querían que se fuera y quienes no.

Niños con sus familias fueron a despedir a la jirafa cuya estancia causó controversia por el clima y las condiciones del lugar donde se encontraba.

“Bye Benito, te cuidas” le gritaba un pequeño cargado en los brazos de su madre.

Para Sandra Martínez, juarense de nacimiento, es difícil decirle adiós a Benito ya que asegura llegó a llenar el hueco que dejó Modesto.

“Me puede que se la lleven de aquí, primero se nos fue Modesto y ahora se llevan a Benito, duele mucho porque representaba a la ciudad”, dijo.

Por la tarde del domingo personal de Africam Safari realizó ejercicios para llevar a Benito al contenedor, se optó por comida para que ingresara y así poder cerrar las puertas.

Una vez dentro se colocó una lona de color blanco para proteger la parte alta de la caja de metal y madera hecha para este traslado.

Una parte de la reja perimetral tuvo que ser removida para dar paso a la grúa telescópica con la que se maniobró la caja y sacarla.

Para evitar incomodar a la jirafa, dicha caja fue levantada a la menor altura posible hasta subirla a la plataforma del tráiler en la que se hizo el traslado.

Hubo complicaciones

En la salida del parque se presentó la primera complicación del traslado, la caja de Benito no libró los cables de la red eléctrica, por lo que con bastones éstos fueron levantados para que pudiera iniciar el viaje.

Fueron ocho meses los que duró Benito en Ciudad Juárez. Llegó el 4 de mayo de 2023 luego de un viaje en un remolque que jalaba una camioneta, desde Culiacán, Sinaloa, de acuerdo con reportes periodísticos.

Ya lo esperan

Una vez que llegue a Puebla, Benito vivirá con siete jirafas con las que, se espera, conviva de manera armónica rápidamente, de acuerdo con experiencias anteriores del director del Parque de Conservación de Vida Silvestre Africam Safari, a donde partirá el ícono juarense.

Estará rodeado de hembras, otros machos e incluso un espécimen joven, de un año de edad que mide 1.80 metros de estatura (por los cinco que mide Benito), con el que mejor se llevará, según las expectativas de Camacho.

Sin embargo, no podrá convivir directamente con ellas a su llegada. El proceso será colocar en la casa de las jirafas (llamada así por el director del parque) el contenedor, en un área en la que Benito podrá oler, ver y escuchar a las demás sin poder tener contacto físico con ellas, pues debe ser desparasitado y se le deben hacer más estudios médico-veterinarios para asegurar su bienestar; aunque sólo de vista, según Camacho, está bien, únicamente con una carga baja de parásitos que fueron revelados tras sus exámenes coprológicos (de heces fecales).

Sobre el tiempo en que tardará Benito en adecuarse a su nuevo entorno, “en mi experiencia, no será mucho”, platicó el especialista, puesto que las jirafas son animales muy sociables.