Ofertan sabores de primavera en la Carlos Amaya

Ciudad Juárez.- Con sandía “doble roja” de Campeche y mango manila de Michoacán, vendedores ambulantes ofrecen sabores de primavera y verano a los juarenses que transitan por la via perimetral Carlos Amaya, casi cruce con calle Ramón Alcázar.

Frente a la estación de bomberos dos grupos de vendedores ofrecen cada uno su producto. Kevin Alexander tiene 36 años, 20 de los cuales se ha dedicado a la venta de sandías en distintas partes del país. Ocho de esos años han sido en Juárez y “la gente siempre responde bien”, pues son mangos “sembrados con amor y regados con miel”.

Se ponen en la vía pública, con permiso de la Dirección de Comercio, según Kevin, para vender su producto para aquellos “que no tienen chance de ir al mercado”. 

Están disponibles para venta cerca de cuatro o cinco toneladas de sandía, contó Kevin, quien dispuso varias de ellas cortadas en algunos pedazos tanto para dar a probar a quien se acerque a preguntar como para que las personas vean lo rojo y jugoso de su producto. 

Añadió que en 15 días llegarán melones, que se unirán a los casi 30 metros de sandías acomodadas para que las personas las observen y se las vayan llevando por precios que rondan entre 100 y 200 pesos por cada una, dependiendo del peso.

Estas ventas suelen durar entre tres y cinco meses, de acuerdo con Kevin, y luego se dedican a la venta de otros productos. En su caso, a la fruta le siguen los guantes, bufandas y bonetes para los tiempos de frío. 

A un lado está un camión de carga con la caja llena de mangos manila, mangos ataulfo y de yaca, un fruto grande y de apariencia espinosa, de pulpa blanca y semillas grandes. Ese es el producto que vende Sonia Ruelas.

“Es mango recién salido de la huerta. Vienen de la huerta al consumidor, sin ningún proceso de congelamiento”, contó Sonia en entrevista. 

La promoción de estos productos es de cinco kilogramos de mango (que pueden elegirlos vendedores o los compradores “pero sin mallugar”) por 100 pesos, y la yaca a 30 pesos el kilo, abundó la comerciante.

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