Galería: Claman por la paz en el Viacrucis

Ciudad Juárez— Decenas de feligreses de la parroquia de Santa María de la Montaña elevaron plegarias durante el Viacrucis viviente para que Ciudad Juárez sea un lugar pacífico.

Alrededor de 600 personas acudieron ayer a la representación número 24 de la Pasión y Muerte de Jesucristo, en la que se reflexionó sobre las situaciones de violencia en la ciudad.

Mientras Jesucristo iniciaba su recorrido al calvario, Jacinto Guzmán, de 58 años rezaba con el contingente el Padre Nuestro y el Ave María; su oración la ofrecía porque sus últimos años los quiere pasar en paz junto a su familia, dijo.

“Es muy triste lo que estamos viviendo en Juárez, mucha gente está sufriendo, necesitamos reunirnos como esta vez, para que todos nuestros rezos lleguen al cielo, es la única esperanza que nos queda, orar y pedir por nuestros hermanos que han sufrido tanto y acompáñalos como hoy en su pesar de corazón, así como lo hacemos con Jesús”, manifestó Guzmán. 

Durante las catorce estaciones en las se representó la muerte del mesías de los cristianos, se realizó una reflexión sobre los problemas que las personas viven de manera cotidiana y se invitó para que continúen con su fe caminando como lo ejemplificó Jesucristo durante su calvario.

Luego de recorrer más de un kilómetro en el Viacrucis viviente, decenas de personas se seguían sumando al recorrido.

En la cuarta estación, María, la madre de Cristo se encuentra con su hijo para llorar al verlo agotado y ensangrentado, mientras se escuchaba la plegaria con voz fuerte que hacía una mujer.

“María, ayúdanos a vivir en un ambiente en donde podamos vivir en un ambiente de paz y armonía en nuestras familias. Dios mío, ayúdame con mi pesar, yo cargo la cruz contigo, por favor ayúdame”, rezaba una mujer del contingente.

Para el sacerdote Rodrigo Cuevas, quien estuvo liderando la representación, en ausencia del padre Aristeo Baca, el compromiso de la Iglesia es crear conciencia sobre las dificultades sobre los acontecimientos violentos en la ciudad.

“Nosotros procuramos crear conciencia en toda la comunidad, realmente la gente que sale afectada, la mayor parte es porque nada tiene que ver con nuestras comunidades fe”, dijo el sacerdote.

“Gran parte de esta situación adversa que vivimos es que hemos echado fuera a Dios de nuestra vida, de la familia, escuelas, trabajos y de la ciudad”, lamentó el sacerdote Rodrigo Cuevas.

Mario Neváres Núñez, quien tiene viviendo en la colonia Santa María alrededor de 30 años, acudió con 20 miembros de su familia al Viacrucis, como una forma de recordar la tradición que el enseñaron sus padres.

Recordar la muerte de Jesús fue para Mario una señal clara de que los ciudadanos y las autoridades tienen un compromiso de solidarizarse con los que han sufrido una pérdida de algún ser querido. “En el camino se recuerda a las personas que tienen sus desaparecidos, pero ellos los recuerdan más con este Viacrucis, tenemos que pedir por todo, por toda la violencia, por todos los que sufren”, manifestó Neváres.

Por su parte Alfredo Ramírez Cardiel, de 22 años, quien representó a Cristo en la pasión, dijo que en el recorrido pensó en cómo Jesucristo pudo llegar a su destino sin beber agua y con un cansancio extremo.

“Yo quería hacer lo mismo, para demostrarle a las personas lo que él hizo por nosotros, me ha tocado varios años ver que mucha gente en el camino, pero en esta ocasión pude sentir más que la gente realmente siguió la historia de Jesús más que mi personaje”, comentó Ramírez.

Mencionó que la violencia siempre ha existido, “sí quisiera que todo el mundo viviera no una Semana Santa, sino una vida santa, en oración, que se acerquen a cualquier iglesia, no importa la religión, así podrán sentir que aún hay una esperanza”, reflexionó Ramírez.

El Viacrucis viviente inició en la explanada de la Parroquia Santa María de la Montaña, en la calle Lorenzo Ávalos.

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