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Juárez

Exigen remoción de Garduño

A un año del incendio en estación migratoria, conmemoran a las 40 víctimas mortales

Hérika Martínez Prado / El Diario

jueves, 28 marzo 2024 | 09:55

| A un año del incendio en estación migratoria, conmemoran a las 40 víctimas mortales

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Ciudad Juárez.- Activistas, colectivos y organizaciones de Ciudad Juárez y El Paso se manifestaron ayer para exigir justicia y reparación del daño para las víctimas del incendio ocurrido hace un año en la estación del Instituto Nacional de Migración (INM), además de pedir la remoción de su titular, Francisco Garduño Yáñez.

“Denunciamos que el delito por el cual se encuentra vinculado a proceso penal queda corto: ejercicio indebido del servicio público. No olvidemos que tras lo ocurrido durante la jornada del 27 de marzo el comisionado continuó revictimizando a las personas con escuetas declaraciones públicas. Ha pintado paredes en las estaciones como mejora de los espacios, dichas acciones son una burla, no representan un cambio real para quienes se desplazan con la muerte”, denunciaron durante la lectura de un posicionamiento público.

Los manifestantes recordaron a las 40 víctimas mortales del incendio ocurrido el 27 de marzo de 2023 en la estación migratoria del puente fronterizo Lerdo, cuyos nombres colocaron en las rejas del edificio que se encuentra bajo resguardo de la Fiscalía General de la República (FGR).

Integrantes del colectivo Chopeke también coordinaron la instalación de cinco monolitos con piedras y adobe, uno por cada una de sus nacionalidades de los 40 migrantes fallecidos: Colombia, Venezuela, Honduras, El Salvador y Guatemala.

“Todos estamos aquí para conmemorar el aniversario de la muerte de 40 personas migrantes en Migración, somos varios grupos de ambos lados de la frontera, denunciando que el único delito que cometieron estas personas fue migrar”, denunció Marisa Limón, directora de Las Americas Immigrant Advocacy Center.

La activista de la organización estadounidense que apoya familias y sobrevivientes en Estados Unidos denunció que a un año no ha habido justicia ni el pago de reparación del daño.

“No hay justicia para estas personas ni para los sobrevivientes, y esa es la lucha que continuamos, para que ambos gobiernos, Estados Unidos y México, los recuerden. Pasó un año y lamentablemente cuando los medios se van, los gobiernos ya no toman en cuenta la realidad de los que quedaron con vida y que esa vida ha sido totalmente cambiada”, apuntó.

Dilan, Asley, Valeria y Nahomi, del colectivo Ángeles Mensajeros de la iglesia cristiana Salmo 100, también llegaron hasta el exterior del INM, pintados del rostro y con alas de ángeles para pedir “Justicia para familias de migrantes asesinados”, y hacer un llamado al gobernador de Texas, Greg Abbott, para tener compasión y empatía por las personas en movilidad.

“Queremos lanzar un mensaje al Gobierno de México: es necesario que transiten los migrantes de una manera segura. Muchos de ellos han fallecido”, señaló el pastor Carlos Mayorga, coordinador del colectivo.

A los gobiernos mexicano y de Texas les pidió ser sensibles con las personas en situación de movilidad, y no utilizar el tema migratorio como un recurso político.

Oran por ellos

En el comedor para migrantes ubicado en las oficinas de la Catedral Nuestra Señora de Guadalupe, el sacerdote Guillermo Morton encabezó una oración en la que participaron un grupo de migrantes, quienes también colocaron veladoras con las que formaron el número 40.

También realizaron un tendedero con mensajes de migrantes a otros migrantes, algunos realizados por madres de quienes murieron en el incendio del INM.

“Las madres escribieron los nombres de sus hijos”, explicó Cristina Coronado, coordinadora del Ministerio para Migrantes de la Sociedad Misionera de San Columbano y también encargada del comedor, quien hace un año apoyó a familias venezolanas para repatriar los cuerpos de sus hijos.

“Hace un año vi que empezaron a subir videos al Internet, yo estaba en Guatemala… uy, murieron un chingo de migrantes, se mira en las cámaras cómo corrían pero no pudieron salir de ahí. Yo la verdad no sabía en qué frontera había sido y vine a Juárez porque era la frontera más segura”, dijo José, quien ayer pasó por la estación del INM y luego acudió al comedor de Catedral. (Hérika Martínez Prado / El Diario)

hmartinez@redaccion.diario.com.mx

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