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Internacional
martes, 17 marzo 2020 | 07:45
Nueva York.- Las restricciones se endurecen en Estados Unidos y en todo el mundo a medida que los líderes se apresuran a enfrentar una nueva realidad.
Más de siete millones de residentes en el área de la Bahía de San Francisco han recibido la orden de limitarse principalmente a sus hogares, uniéndose a las medidas tomadas por Italia, España, Francia y China.
"Es malo", admitió el presidente Trump, cuando los mercados financieros se hundieron y los economistas advirtieron sobre una fuerte recesión que ya podría estar en marcha.
"Estamos en guerra", dijo el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
El enemigo es invisible e insidioso, reuniendo fuerzas de los lazos de la conexión humana. Entonces, los funcionarios de salud pública están pidiendo a la gente de todo el mundo que corte esos lazos.
Mientras que las naciones, los estados y las localidades ofrecían diferentes restricciones con diferentes grados de aplicación, el mensaje se estaba uniendo en torno a un desafío simple pero desalentador: mantener la distancia.
En todo el mundo, se han reportado alrededor de 180 mil casos. Más de 7 mil personas han muerto. Pero más de 80 mil se han recuperado.