Una victoria diplomática de incierta resistencia

Nueva York.- La cosa estuvo muy cerca. Si un misil o dron hubiera caído y matado muchos israelíes, lo que temían los estadounidenses, la región se hubiera incendiado.

Así que, cuando las fuerzas israelíes y estadounidenses, con la ayuda de los aliados árabes, se hicieron cargo de una defensa casi perfecta contra el ataque aéreo del pasado fin de semana de Irán, representó no sólo una hazaña militar extraordinaria y diplomática, sino también una importante victoria para el esfuerzo que ha hecho el presidente Biden de evitar una escalada de la guerra en Medio Oriente.

Biden y su equipo esperaban que los sucesos durante el fin de semana pudieran darle a los tres actores importantes la victoria suficiente y que todo terminara allí.

Irán podría decir que tomó represalias con una agresiva acción como respuesta al ataque israelí en donde murieron algunos de los oficiales militares de alto rango.

Israel le demostraría al mundo que su ejército es demasiado formidable para desafiarlo y que Irán es impotente contra él.  Y Estados Unidos impediría que la región explotara.

Sin embargo, podría no haber resultado de esa manera.  En lugar de capitalizar la victoria, como en realidad lo fue, oficiales israelíes dijeron este lunes que iban a responder --- sin mencionar cuándo o cómo --- por lo que los asesores de Biden están tratando de ver qué podría implicar eso.

Un ciberataque menos visible o una precisa pero limitada acción militar podrían satisfacer el deseo de Israel de reestablecer la disuasión sin provocar que Irán vuelva a atacar nuevamente.

Un ataque más extenso en suelo iraní, por el contrario, podría provocar que Teherán realice un contraataque e inesperadamente el conflicto podría explotar en una sostenida y cada vez más peligrosa guerra.

“Este fin de semana vimos a un Biden en su mejor momento”, comentó Laura Blumenfeld, analista de Medio Oriente de la Universidad Johns Hopkins y ex asesora política del Departamento de Estado.

“La demostración aérea liderada por Estados Unidos junto con sus aliados europeos y árabes fue como el tráiler de una película de acción de una nueva alianza de defensa aérea de Medio Oriente”.

Aunque agregó que la realidad es que la Fuerzas de Defensa Israelí inevitablemente van a responder.

La exitosa defensa de Israel fue el resultado de 10 días de intensa coordinación diplomática y militar de la administración Biden y años de relaciones sobre la seguridad construidas por varias administraciones en esa región.