Asegura periodista británico que agente de CBP lo acusó de dar noticias falsas

Washington.- Cuando James Dyer se acercó a un oficial de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP) en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles el jueves, como cualquier otro viajero, presentó su visa de periodista al agente y lo que debería haber sido una parada migratoria de rutina se transformó rápidamente en “una experiencia un tanto inquietante”.

En un extenso mensaje de Twitter que se ha vuelto viral desde entonces, Dyer, quien reporta sobre películas y televisión para la revista Empire en el Reino Unido, detalló cómo el agente de la CBP lo acusó de “ser parte de los ‘medios de noticias falsas’” antes de lanzar una inapropiada “diatriba haciendo eco a la retórica utilizada por el presidente Trump en sus frecuentes ataques contra los medios de comunicación”. Dyer le dijo a The Washington Post que había volado desde Londres a Los Ángeles para la D23 Expo de Disney en Anaheim, California, donde planea escribir sobre Star Wars.

“Quería saber si alguna vez había trabajado para CNN o MSNBC u otros medios que están ‘difundiendo mentiras al pueblo estadounidense’”, según tuiteó Dyer, haciendo referencia a dos organizaciones de medios que Trump ha criticado en repetidas ocasiones y tildado de difundir “noticias falsas”. “Me dijo agresivamente que los periodistas son mentirosos y están atacando la democracia estadounidense”.

Un vocero de la CBP le dijo a The Post el jueves por la noche que la agencia estaba al tanto de la experiencia de Dyer.

“Todos los oficiales de CBP hacen un juramento, una promesa solemne que transmite una gran responsabilidad y que debe acatarse en todo momento con el máximo profesionalismo”, según el comunicado. “Los comentarios o comportamientos inapropiados no son tolerados y no reflejan nuestros valores de vigilancia, integridad y profesionalismo”.

La experiencia narrada por Dyer se dio a conocer ahora cuando los agentes de la CBP están siendo acusados de hostigar verbalmente y, en al menos un caso, detener a periodistas que vienen del extranjero. En abril, la clasificación de Estados Unidos en el Índice Mundial de Libertad de Prensa cayó por tercer año consecutivo, una disminución que los investigadores atribuyen al lenguaje incendiario de Trump, según informó Paul Farhi, del Washington Post. Este año, por primera vez desde que se el índice fue dado a conocer en el 2002, el trato que los periodistas ha recibido en Estados Unidos fue clasificado como “problemático”.