Advierte Biden que extremismo liderado por Trump amenaza a la democracia

Filadelfia.- El presidente Biden viajó al Salón de la Independencia ayer para advertir que los valores democráticos de Estados Unidos están siendo atacados por fuerzas extremistas leales al expresidente Donald J. Trump, utilizando un discurso en horario de máxima audiencia para definir las elecciones de mitad de período como una “batalla por el alma” de esta nación.”

En un discurso de 24 minutos, Biden culpó a su predecesor de avivar un movimiento lleno de negadores de las elecciones y personas que pedían violencia política. Sin embargo, hizo todo lo posible para declarar que no todos los republicanos abrazan el extremismo y dijo que defender la democracia requeriría rechazar a Trump y su ideología en las elecciones de este otoño.

“Donald Trump y los republicanos de MAGA representan un extremismo que amenaza los cimientos mismos de nuestra República”, dijo Biden, flanqueado por guardias de la Marina.

“Pero no hay duda de que el Partido Republicano de hoy está dominado, impulsado e intimidado por Donald Trump y los republicanos del MAGA”, agregó. “Y eso es una amenaza para este país”.

En declaraciones a varios cientos de espectadores sentados frente al Salón de la Independencia en Filadelfia, donde nacieron las instituciones políticas del país, y a solo unos pasos de la Campana de la Libertad, Biden dejó en claro que cree que la violencia política y la negación electoral propugnada por el expresidente y sus aliados han dañado la reputación de Estados Unidos en el extranjero.

Citó el “extraordinario experimento de autogobierno” representado por la Constitución estadounidense y la Declaración de Independencia, y dijo que “la historia nos dice que una lealtad ciega a un solo líder y la voluntad de participar en la violencia política es fatal para la democracia”.

El presidente fue interrumpido por manifestantes que corearon “Vamos Brandon”, una referencia a un crudo epíteto dirigido a Biden que es popular entre los partidarios de Trump. En un momento, el presidente bromeó diciendo que “los buenos modales no son nada por lo que haya sufrido”, pero también defendió sus derechos a protestar y dijo que “tienen derecho a ser ruidosos”.