Proponen hasta 12 años de prisión contra conductores imprudentes

Chihuahua.– Diputados del Congreso del Estado de las fracciones de Morena, PAN y PRI, presentaron y se unieron a iniciativas para reformar la Ley de Movilidad y Tránsito para imponer agravantes a los automovilistas que provoquen accidentes viales por exceso de velocidad, consumo de alcohol o sustancias en  zonas urbanas.

Se trata de una reacción legislativa a partir del caso del joven de 17 años, de nombre Rolando, que el pasado 20 de febrero fue víctima de la imprudencia de una conductora que conducía a 130 kilómetros por hora sobre la avenida Río de Janeiro, de Chihuahua capital, cuya camioneta pick up cayó sobre el vehículo que conducía el joven, luego de invadir el camellón que funcionó como rampa.

La diputada de Morena, Rosana Díaz Reyes, presentó la propuesta que agrega un inciso G al artículo 91 de la Ley de Vialidad y Tránsito para agregar sanciones administrativas a quien provoque accidentes y al conducir a 25 kilómetros por hora sobre el límite de velocidad permitido. 

“El pasado 20 de Febrero en Ciudad Juárez una joven de 17 años  murió (Edith de los Santos Xolio), y al menos otros 5 jóvenes estudiantes resultaron heridos luego de ser atropellados por un conductor que presuntamente viajaba en estado de ebriedad. El conductor ya identificado y detenido mientras conducía hacia supuestas maniobras peligrosas llamadas “ceros” quien presuntamente manejaba en estado de ebriedad”, dijo la diputada desde la tribuna, al exponer otro de los temas. 

También se presentó otra iniciativa por parte de la fracción de Morena para agregar más disposiciones al Código Penal para aumentar la pena una mitad cuando se trate de lesiones y homicidio imprudencial a causa de desproporcional exceso de velocidad. 

La fracción del PAN, por conducto de la diputada Margarita Blackaller, propuso que se impongan de tres a diez años de prisión a quien al conducir bajo el influjo de estupefacientes, psicotrópicos u otras sustancias, cometa homicidio o lesiones graves a las víctimas de su imprudencia, mientras que cuando se acumulen agravantes, aumentaría la pena de 4 a 12 años de prisión. 

Las tres fracciones legislativas coincidieron en la necesidad de endurecer el código para establecer sanciones punitivas y evitar tragedias que provocan automovilistas carentes de conciencia.