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Espectáculos

La vida del conquistador

‘Napoleón’, la cinta de Ridley Scott que llega a los cines esta semana, refleja cómo fue la implacable ambición y la mente estratégica del líder militar que se convirtió en emperador

Associated Press

lunes, 20 noviembre 2023 | 11:34

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Para ser una figura histórica tan famosa, Napoleón sólo ha tenido apariciones fugaces en el cine desde la película muda de Abel Gance de 1927.S tanley Kubrick tenía grandes planes para una epopeya napoleónica que no llegó a realizarse. (Steven Spielberg está intentando revivir esos planes en forma de serie). Napoleón y su sombrero bicorne -más icono de la historia que personaje real- sólo aparecen en odiseas de viajes en el tiempo como "Time Bandits" o "Bill and Ted's Excellent Adventure".

La fiesta, sin embargo, por fin ha comenzado en "Napoleón", de Ridley Scott, protagonizada por Joaquin Phoenix.

Esta película biográfica de dos horas y treinta y ocho minutos de duración ofrece un espectáculo histórico repleto de sangrientas batallas europeas y enormes maniobras militares.

Pero no hay que confundir "Napoleón" con una epopeya histórica al uso. La primera sensación de que no se trata de una gran glorificación de un gran hombre de la historia llega al principio de la película, cuando un Bonaparte de 24 años dirige el asedio a las tropas británicas que controlan la ciudad portuaria de Tolón. Cuando Napoleón, entonces mayor, se lanza al combate, está visiblemente aterrorizado, incluso jadeante.

Poderoso y arrogante

Independientemente del resto de la película de Scott y de la fascinante interpretación de Phoenix, las acciones de Napoleón nunca son mucho más complicadas que eso. Asume el poder con arrogancia. Su golpe de Estado contra el Directorio francés en 1799 es una farsa destartalada. Despliega sus ejércitos por todo el continente sin la menor preocupación. Es propenso a rabias petulantes, gritando a los británicos:"¡Os creéis tan grandes porque tenéis barcos!".

Napoleón se adhiere más a la teoría del "No tan gran hombre" de la historia. Este Napoleón no es extraordinario ni es un gran hombre. Es un bruto impulsivo, de piel fina, que recorre Europa dejando a su paso campos de batalla llenos de soldados muertos. Cuando, durante una campaña en Egipto, le informan durante el almuerzo de que su mujer, Joséphine (Vanessa Kirby), tiene una aventura en París, responde secamente al mensajero: "No hay postre para ti".

Durante más de 200 años, las caracterizaciones de Napoleón han oscilado entre el genio reformador nacido de la Revolución Francesa y el tirano merodeador cuyas guerras dejaron tres millones de muertos. El propio Napoleón contribuyó a dar forma a su legado mientras estaba exiliado en Santa Elena con unas memorias autocomplacientes. 

En "Napoleón", que comienza con María Antonieta en la guillotina y termina con Napoleón en Santa Elena, donde murió a los 51 años en 1821, resulta sorprendente el desprecio que siente la película por su protagonista. Las epopeyas históricas de Hollywood se han inclinado tradicionalmente hacia el engrandecimiento, no hacia el desnudamiento de egos masculinos frágiles e ilusos que exclaman durante la cena: "¡El destino me ha traído aquí! El destino me ha traído esta chuleta de cordero".

SIDE O RECUADRO

Un Napoleón con ecos contemporáneos

“Napoleón” sin duda tiene ecos contemporáneos. A lo largo de la película se suceden los principales acontecimientos, como la caída de Robespierre, el golpe de Estado de 1799, la proclamación de Napoleón emperador en 1804 y la triunfal batalla de Austerlitz. Esta última es la mejor escena de la película de Scott, que termina con una derrota de las fuerzas rusas que huyen por un estanque helado mientras el bombardeo de cañones las hunde en una tumba de hielo.

Pero en el guión de David Scarpa, el verdadero hilo conductor de "Napoleón" no es la sucesión de batallas que conducen a la caída que todos sabemos que se avecina en Waterloo.

Cuando la ve por primera vez en una fiesta llena de gente, se queda paralizado. Cualquiera lo estaría. La escurridiza Kirby, con un corte pixie, rivaliza con Phoenix por la presencia más potente en "Napoleón". Tiene un control absoluto sobre Napoleón, que resulta no ser más suave en el dormitorio de lo que es entre la sociedad. Cuando él regresa de Egipto furioso por los rumores de infidelidad de ella, tienen una larga pelea que termina con ella dándole la vuelta a la tortilla.

UNA HISTORIA ÉPICA

‘Napoleón’

Director: Ridley Scott

Duración: 158 minutos

Clasificación R

Estrena en cines el 23 de noviembre

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