Mantener el equilibrio

“Estamos empezando a implementar todo esto para homogeneizar los criterios. Nos regimos por la ley. Los manifiestos de impacto ambiental, sus resolutivos, traen una serie de condicionantes que nosotros tenemos que cumplir para llevar a cabo esto en cada obra”.

Eunice Martínez

Supervisora de Sustentabilidad

Desde la planificación, diseño, puesta en marcha, mantenimiento y posible remodelación, la construcción sustentable tiene el propósito de evitar causar un daño ambiental, y por ende, a la sociedad. 

Este tipo de construcción sostenible o sustentable prioriza la salud de las personas, pues llevar a cabo un proyecto como la edificación de una nave industrial puede tener impactos negativos como el ruido, las emisiones contaminantes y los residuos.

Global Engineering Group vigila que cada obra que emprende sea hecha de manera que el perjuicio al medio ambiente sea mínimo o nulo, para lo cual el departamento de sustentabilidad trabaja con ahínco en los temas que le competen.

“Este es un departamento de nueva creación, estamos empezando a implementar y a darle seguimiento a todo lo que tiene que ver con la legislación ambiental para la construcción y llevamos a cabo las certificaciones que el cliente nos pide”, informa Eunice Martínez, supervisora de sustentabilidad.

Comenta que la formulación, conducción, vigilancia y evaluación de la política ambiental es competencia de la jurisdicción estatal, “que ha hecho énfasis especial en el manejo de residuos y en el cuidado de recursos”.

“Estamos empezando a implementar todo esto para homogeneizar los criterios. Nos regimos por la ley. Los manifiestos de impacto ambiental, sus resolutivos, traen una serie de condicionantes que nosotros tenemos que cumplir para llevar a cabo esto en cada obra”.

Martínez, quien es arquitecta y tiene una maestría en ingeniería ambiental, remarca que la sustentabilidad tiene que ver con varios ámbitos, “con el impacto al ambiente, a la sociedad, a la economía, entonces debe haber un equilibrio entre los tres”.

Para lograr tal armonía, la empresa obtiene certificaciones que miden su esfuerzo por aminorar cuestiones como la generación de residuos o emisiones de gases de efecto invernadero.

Una de las certificaciones que tiene GEG es la conocida como LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, por sus siglas en inglés), un sistema con reconocimiento internacional para edificios sustentables creado por el Consejo de Edificación Sustentable de Estados Unidos (U.S. Green Building Council). 

Entre los beneficios que proporciona esta evaluación se encuentran: espacios con mejores condiciones para la salud y productividad, reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, acceso a incentivos fiscales, disminución en los costos de operación y residuos, incremento del valor de sus activos, y ahorro energético y de recursos.

Para alcanzar dicha certificación, apunta Martínez, existe una serie de lineamientos que se deben cumplir. Éstos lograrán soluciones de alta eficiencia energética y ambiental, con base en los requerimientos de la normatividad LEED.

“Por parte de la legislación ya están viendo que todo esto se cumpla y lo están implementando rigurosamente, lo que debería haber pasado hace varios años. La certificación LEED ya tiene más de 10 años en Estados Unidos, y aquí hace unos cinco. Antes a los desarrolladores no les llamaba la atención, pero ya es un requisito”, agrega la supervisora.