Nuevo modelo de pruebas Covid busca evitar cuarentena de estudiantes

Cuando las escuelas de Marietta, Georgia, abrieron sus puertas el 3 de agosto, la variante Delta altamente contagiosa se extendía por todo el sur y los niños no se salvaban.

Para el 20 de agosto, 51 estudiantes en el pequeño distrito escolar de la ciudad habían dado positivo por coronavirus. Cerca de 1 mil personas más habían sido marcadas como contactos cercanos y tuvieron que ponerse en cuarentena en casa durante siete o diez días.

"Eso es mucha escuela, especialmente para los niños que se están recuperando de 18 meses en una pandemia en la que faltaron mucho o tuvieron que hacer la transición a la escuela virtual", dijo Grant Rivera, superintendente de las escuelas de la ciudad de Marietta.

La semana pasada, el distrito cambió de rumbo. Los estudiantes identificados como contactos cercanos ahora pueden continuar asistiendo a la escuela siempre que no presenten síntomas y den negativo en la prueba del virus todos los días durante siete días.

Un número cada vez mayor de distritos escolares está recurriendo a las pruebas para mantener a más niños en el aula y evitar interrumpir la vida laboral de sus padres. El enfoque de uso intensivo de recursos, a veces conocido como "prueba para quedarse" o cuarentena modificada, permite a los estudiantes que han estado expuestos al virus permanecer en la escuela siempre y cuando realicen pruebas de Covid frecuentes, que generalmente proporciona la escuela, y se adhieran a otras precauciones.

Los expertos coinciden en que los niños infectados con el virus deben aislarse en casa, pero la cuestión de qué hacer con sus compañeros plantea un dilema.

Permitir que los niños que han estado expuestos al virus permanezcan en la escuela plantea un riesgo potencial de transmisión, y el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades dice que "no hay pruebas suficientes" para respaldar el enfoque. En cambio, recomienda que los contactos cercanos que no hayan sido completamente vacunados se pongan en cuarentena durante 14 días (los contactos cercanos vacunados pueden permanecer en el aula siempre que sean asintomáticos y usen un cubrebocas, según la guía escolar de la agencia).