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Opinión

Tragedia electoral

A medida que se consolidan cifras, se consolida también la percepción de que la cuestionada Claudia Sheinbaum es la gran perdedora en los emblemáticos comicios

Enrique Aranda
Analista

sábado, 12 junio 2021 | 06:00

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Ciudad de México.- A medida que se consolidan cifras y se asume la verdadera dimensión del golpe electoral propinado al oficialismo lopezobradorista por la ciudadanía capitalina el domingo, se consolida también la percepción de que la cuestionada Claudia Sheinbaum es, al margen el cotidiano esfuerzo de su “padrino” en Palacio por (intentar) eximirla de toda culpa y lavarle el rostro, la gran perdedora en los emblemáticos comicios…

Esto no sólo porque ya nadie hoy, cuando no sea su vecino tabasqueño, se atreve a apostar por su eventual proyección política futura de cara al 2024, sino, igualmente, porque la derrota de Morena en 10 de las 16 alcaldías de la Ciudad de México incrementa la dificultad y riesgos de gobernar casi en la misma proporción en que, en contraste, declina su capacidad operativa y de gestión o, peor, porque la derrota eliminó a prácticamente todos sus afines y aliados —morenos puros, obvio— entre quienes podría haber estado su sucesor en el exPalacio del Ayuntamiento.

Perdió y renunció ya incluso el impresentable Víctor Hugo Romo, en Miguel Hidalgo; Dolores Padierna, representante de sus ¿nuevos? aliados, encabezados por René Bejarano, El Señor de las Ligas, fracasó en Cuauhtémoc como, sólo por citar otro caso, cayó también en su intento reeleccionista el otrora “predilecto” diputado Alfonso Ramírez Cuéllar. Es verdad que su incondicional Clara Brugada seguirá en Iztapalapa y Armando Quintero en Iztacalco, pero seamos serios, ¿alguien cree que alguno de ellos podría ganar una elección en la polarizada y dividida metrópoli, donde hace apenas unos días las (odiadas) clases altas y medias hicieron valer, como nunca antes quizá, su derecho al sufragio?

¿Alguien de su ineficaz gabinete u operador cercano?, ¿activarán las opciones de personajes como Martí Batres o el también fracasado Mario Delgado en ausencia de “cartas”? El nivel del desastre electoral, insistamos, es en verdad extraordinario, impensado…

Asteriscos

* Inexplicable, en atención a presiones o, como dijera alguno, sólo para evitar “tensar más la cuerda” con Ya Sabemos Quién, la decisión del INE en Miguel Hidalgo de reabrir 385 paquetes de una elección que, según el PREP, la aliancista Margarita Zavala había ganado ¡por más de 40 mil votos!

* Ahora sí que en medio de los festejos por su incuestionable triunfo a nivel estatal y capitalino en Nuevo León, Movimiento Ciudadano se apresta a anunciar el relevo de su cuestionado dirigente interno, Horacio Tijerina, por la senadora Indira Kempis, quien se prepara para asumir la posición. Bien.

* Inusual cierre de filas de diputadas y senadoras del país en torno a la defensa del Club Social y Deportivo Campestre de Tijuana que, como se sabe, sigue siendo asediado por el impresentable gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez. “Su actuar es arbitrario y por capricho”, dicen.

* Mal y de malas para casi una docena de miembros de la familia Jenkins de Landa, colaboradores y abogados, contra quienes un juez de Control poblano giró una segunda orden de aprehensión por la comisión del delito de fraude, por 14 mil millones de pesos, contra la Fundación Mary Street Jenkins.

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