Prometió intervenir para evitar agresión

• Prometió intervenir para evitar agresión

• ‘Rosel Rosel’ adelanta primicia del informe

• Vuelve la ‘casita del amor’ al C-4 

• Nuevo intento de Redes Sociales hoy

Las tormentas fuertes y por tiempo extenso han inspirado la metáfora popular de que se cae el cielo.

Eso le está ocurriendo política y legalmente al gobernador Javier Corral, a unos meses de iniciar el ocaso de su régimen.

Que en paz descanse Miroslava Breach recurría siempre a una frase que su amigo el mandatario debió escuchar de ella muchas veces: “Eran muchos y parió la abuela”.

Corral enfrenta múltiples y severos problemas a los que se ha sumado esta semana el sonoroso juicio por el crimen contra Miroslava, cometido por una facción del Cártel de Sinaloa que opera entre Chihuahua y Sonora, específicamente en la región del chihuahuense municipio de Chínipas.

Desde que el asesinato fue cometido el 23 de marzo del 2017, Corral ha negado sistemáticamente el involucramiento de varios de sus colaboradores más estrechos en los preparativos del crimen y su propia omisión en el mismo, a sabiendas que peligraba la vida de la periodista.

El miércoles apareció en el juzgado de distrito donde se llevan a cabo las diligencias contra el único detenido como autor intelectual del asesinato, Héctor M. O. “El Larry”, otra prueba de que Corral conocía santo y seña sobre las amenazas.

Es una captura de pantalla difundida antenoche durante diligencia judicial en la que Miroslava le cuenta a una colega periodista lo siguiente: “... me llamó Corral el viernes pasado, en muy buena postura frente al tema del que hablamos. Dijo que no me preocupara, que él tomaría cartas en el asunto con el alcalde de Chínipas”.

Sin duda la Fiscalía federal a cargo de las investigaciones correspondientes ya encontró en el número telefónico (o números) de Corral ésas y otras conversaciones todavía más reveladoras sobre su acción y su omisión en toda la trama.

Las hermanas de la colega asesinada han ratificado ante el juez esa participación del gobernador. De inmediato Corral las revictimizó llamándolas mentirosas.

Pero ya no son trascendidos ni filtraciones ni chismes, como solía calificarlos el mandatario, es la historia que lo está alcanzado y lo involucra de cuerpo completo en los acontecimientos.

Quien más sabe de esos hechos es él. Deberá llegar el momento en que los narre ante las autoridades correspondientes.

Es el cielo que le cae encima como colofón de su mal gobierno.

***

En la ciudad de Chihuahua se siguen preguntando por qué o de parte de quién sacó Rogelio Ramos el salero, rascó la herida y echó ahí todo el contenido contra el exgobernador Patricio Martínez durante su reciente toma de protesta como presidente de los hoteleros y moteleros en esta frontera.

Tal vez fue porque ahí estuvo en el evento el senador por Morena Cruz Pérez Cuéllar, quien aspira a la gubernatura y se presume que tiene algo de respaldo por parte de Martínez García. Será por eso o sepa Dios por qué. 

Recordemos que también estuvieron el gobernador, Javier Corral (enemigo acérrimo de Cruz) y el vicegobernador federal, Juan Carlos Loera, también crítico duro del senador.

***

Con cabellos en las uñas dicen que se quedó ayer Francisco “La Coyota” Lozano, secretario particular del gobernador Javier Corral por el coraje que sufrió al checar el Face de “Rosel Rosel Axl” donde publica una foto del mandatario y un texto de los que aparecerán en su tercer informe de gobierno, que presentará... ¡en marzo!

O es muy audaz Rosel Rosel o tuvo la autorización de su jefe para manejar la “exclusiva” desde su red social (imagen en la versión digital de La Columna).

Para nuestros lectores, escasamente conocedores de las entrañas de Palacio, debemos aclarar que el misterioso Rosel es en realidad, nada más pero nada menos, el jefe de fotógrafos Francisco Alejandro Alanís, uno de los tres Panchos de Corral Jurado. Los otros dos son precisamente “La Coyota” Lozano y Francisco Muñoz, desplazado de los secretos de Palacio por Lozano.

***

Después de varias semanas de no verse, la “casita del amor” del comisionado estatal de Seguridad Óscar Alberto Aparicio volvió a estacionarse afuera de su oficina en el C-4 de la ciudad de Chihuahua.

Los insidiosos policías estatales cuentan muchas leyendas de la motorhome marca GMC que llegó junto con el jefe federal cuando asumió el mando de la CES, en el no tan lejano año 2016. 

Dicen de todo a la casa rodante, desde que es un espacio privado para hacer negocios fuera de cámaras y escuchas, hasta que sirve de hotel ocasional cuando se queda hasta tarde en el “trabajo”.

Lo que es real, totalmente, es que Aparicio mandó adaptarle un espacio con sombra, pues no eran pocas las ocasiones que las utilizaba para reuniones especiales. Sólo él traía llave, salvo algunas excepciones que se la encargaba a su compadre y jefe operativo,Álvaro Serrano.

La baratija importada no baja de los 30 mil dólares, y siempre ha sido para uso exclusivamente personal del comisionado. Es uno más de los gustos extravagantes que gusta de presumir, de los que puede darse con salario de funcionario público.

Desde enero, sin embargo, mandó retirarla del lugar y estacionarla en otra parte, no se sabe exactamente dónde. Eso motivó que se reforzaran los rumores de que estaba próxima su salida del cargo, con la llegada del nuevo secretario de Seguridad, Emilio García Ruiz.

Sin embargo, volvió a estar “20” –eso significa que está “listo” en las claves de la Policía Estatal– a principios de esta semana. De nuevo estacionada, limpiecita, en la sombrita a un costado de la oficina del jefe Aparicio.

Tal vez sea para que en esa casa móvil se vaya de Chihuahua en los próximos días. Tal vez, al contrario, es señal de que ya logró el perdón del Palacio de Gobierno y el visto bueno del nuevo secretario para quedarse más tiempo en el cargo por el que tanto se ha sacrificado.

***

Este viernes en la capital del mundo, Hidalgo del Parral, buscarán los chavos de Elba Esther Gordillo, alcanzar los arriba de tres mil asistentes en asamblea estatal de Redes Sociales Progresistas y avanzar de esa forma hacia la constitución del partido político que sería refuerzo de la cuarta transformación en las elecciones del año próximo.

Nos han dicho que la responsabilidad “política” para juntar unas siete mil personas, y de ahí obtener al menos tres mil “válidas” con su INE y demás requisitos, es de el independiente alcalde Alfredo “El Caballo” Lozoya.

Pero los operadores del célebre “Caballo” niegan que sea así y han respondido que este objetivo sigue corriendo a cargo del regidor en Juárez, Alberto Guzmán, quien hizo un primer intento en esta frontera para reunir esa cantidad de gente el pasado ocho de diciembre.

A ver qué noticias tenemos desde allá hoy durante la tarde.