No le afloja a las vísceras ni en la enfermedad

-No le afloja a las vísceras ni en la enfermedad

-Exhibe anticorrupción flojera de diputados

-Ponen lupa a casos fallidos de duartistas

-Operan vs la feria, pero aplauden tiradero de Corral

Ni una pestaña movió ni ha movido en solidaridad Javier Corral por la salud de la gobernadora electa, Maru Campos.

Hace ya tres días anunció Maru haberse contagiado de Covid e inclusive algunas horas después haber ingresado a un hospital para su recuperación. Miles de chihuahuenses le han deseado son pronta recuperación, el gobernador ni una palabra.

Eso confirma que las vísceras siguen predominando en Corral Jurado por encima del interés gubernamental. Constitucionalmente ella es ya gobernadora electa y por ende representante de los chihuahuenses.

Por todas las áreas del Poder Ejecutivo Estatal hay equipos de entrega recepción trabajando hacia el relevo de mandos. Deberá quedar concretado ese proceso a finales de agosto para luego dar paso a la toma de protesta tanto de la gobernadora como de su gabinete, la primera semana de septiembre.

Ha representado para el gobernador esa etapa un severo golpe a su soberbia y egolatría. No asimila ni por el interés de Chihuahua su derrota frente a los múltiples intentos que hizo por impedir justo la llegada de Maru a la gubernatura.

Festejó el lunes en Juárez con varios pasteles su cumpleaños 55, pero ninguno le brindó la serenidad para raspar de su piel algo del odio y dedicarle unas líneas a quien será su sucesora.

No lo motivó, según puede apreciarse en las imágenes de versión digital, ni el nuevo perro que le fue obsequiado por la presidenta del DIF, Cinthia Chavira. Sigue sin calentarlo ni el sol.

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En febrero del 2020 instaló el gobernador Corral una oficinita en la Secretaría Particular de Palacio de Gobierno para su chalán más que amigo, José Pablo Mendoza Ávila, el encargado de las croquetas para las mascotas del gobernador, de sus pelotas de golf, de sus pelotas de tenis, de sus bicis y muchos otros asuntos estrictamente personales.

A esa oficina le dieron por nombre Coordinación de Atención y Servicios a la Ciudadanía. Le otorgaron algo de presupuesto y un sueldo superior a los 50 mil pesos mensuales a su titular “Josepa”, como es conocido Mendoza.

En realidad solo se trató de tapar el ojo al macho. Igual que en múltiples áreas de Gobierno, esa fue reducida a una simple aviaduría; una área para atender a la persona de Javier Corral, no al gobernador, menos a la ciudadanía.

Durante el último año y medio “Josepa” alternó ese “trabajo” con la de golpear en redes sociales y donde fuera a la entonces precandidata del PAN a la gubernatura, Maru Campos. Lo hizo hasta que se cansó.

Pero ahora con la derrota monumental ha dado vuelta la rueda de la fortuna. Corral pretende heredar a José Pablo en cualquier oficina gubernamental porque no piensa sacar un peso de su bolsa para sostenerlo como su ayudante. Generoso jamás ha sido salvo con dinero ajeno.

El encargado de gestionar nuevo trabajo para José Pablo es otro cuyo deporte era atacar al equipo entrante, el secretario particular de Corral, Francisco “Coty” Muñoz, quien apela a contactos dentro del grupo de transición y hasta a organismos autónomos y descentralizados en busca del objetivo.

Gestiona algo modesto, alguna dirección o jefatura de oficina, nomás que no baje de 50 mil mensuales. “Solo eso”.

En versión digital podemos leer algunas de las decenas de pedradas que aventó a través de su red social cuando todavía creía que su patrón era invencible.

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Que dejen de llenarse la boca hablando de combatir la corrupción y se pongan a trabajar para lograrlo, es el mensaje enviado por el Comité de Participación Ciudadana (CPC) a los diputados.

El comité que encabeza Liliana Ochoa e integran René Moreno Medina, Miguel Salvador Gómez González y Carmen Lucía Álvarez González, publicó ayer un fuerte reclamo por la falta de interés del Congreso del Estado en nombrar la Comisión de Selección del Sistema Estatal Anticorrupción.

“Pedimos apoyo a toda la comunidad de Chihuahua para poder localizar a estas personas”, escribió el CPC en su muro de Facebook, con las fotografías de la pesquisa que busca a los diputados Ana Carmen Estrada, Marisela Sáenz, Blanca Gámez, Jorge Soto y Omar Bazán Flores.

La Comisión de Selección tiene como responsabilidad emitir una convocatoria para la presentación de las postulaciones de aspirantes a ocupar un cargo dentro en el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción.

Hasta la fecha está incompleto luego de terminar su gestión Ana Isabel Terrazas y Norma Yadira Lozano.

“El siete de diciembre de 2020 tenían que estar nombrando a una nueva Comisión de Selección del Sistema Anticorrupción. Desde entonces no hemos sabido nada, van más de 239 días. Si usted ha visto a alguna de estas personas o tiene información sobre ellas, por favor repórtelo aquí”, dice el post.

¿Será que los miembros del CPC ya están cansados de que los vean chiquitos y orejones al no tener mayor poder que su supuesta causa anticorrupción?

El que le hacen a los diputados no es el único reclamo. También apuntan a la Función Pública por la falta de avance en la investigación de una queja por corrupción interpuesta hace 775 días. Y la situación es la misma: los días pasan y no ven resultados.

Los toman a nada, pese a que se supone el CPC preside los trabajos del Sistema Anticorrupción en el estado. Visto así el organismo parece no tener mayor trascendencia real. Si al dichoso comité no le hacen caso, ¿qué puede esperar el resto de las personas?

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Para que la secretaria de la Función Pública, Mónica Vargas Ruiz, no se salga por la tangente, la encargada de la recepción de la dependencia, María de los Ángeles Álvarez, le pidió toda la información detallada de lo que coloquialmente se conoce como “expedientes x”.

Álvarez Hurtado, extitular del Órgano Interno de Control de la gestión municipal, mandó el pasado 28 de julio la petición de información a Vargas, quien se había limitado a un informe general de la dependencia. La solicitud mediante oficio es visible en versión digital.

Como todos los secretarios del gabinete corralista, han entregado en un “machote” la situación de sus respectivas dependencias. No hay números claros ni reales en esos documentos, más bien parecen un informe de gobierno lleno de logros, aplausos y confeti.

Por eso, suponemos, es la petición tan detallada. Va centrada en los casos que la Suprema Corte de Justicia terminó por derrumbarle a la Función Pública, los cuales estaban enfocados en el exgobernador César Duarte y sus colaboradores.

Seguramente el equipo de transición va a revisar con lupa el avance de cada caso, que es nulo a estas alturas y pese a trabajar en ello desde 2017.

La intentona es cargarle el fracaso de la Función Pública corralista al nuevo Gobierno estatal que comienza en septiembre. De ahí la necesidad de los próximos funcionarios de blindarse para que no les cuelguen milagritos que no les corresponden.

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Algunos directivos de cámaras empresariales son con frecuencia bastante incongruentes; por conveniencia, desde luego, pero incongruentes. Hoy se oponen a la Feria Juárez organizada por el Municipio, pero nunca se opusieron al tiradero de obras que dejaría Javier Corral en la ciudad; muy al contrario, le colocaron pavimento político para no provocarle ronchas y hasta lo aplaudieron aunque carecieran los proyectos de lo más elemental, los permisos de construcción.

En realidad no les importa la ciudad, les interesa su estricto bolsillo. Ciudad Juárez sería muy distinto si le aportaran algo de lo mucho que les da.