PUBLICIDAD

Opinión

¿Morena no entra en Chihuahua?

No pudo con el estado de Chihuahua, donde se impuso Maru Campos, quien sobre sus hombros trae una carga muy pesada

Óscar David Hidalgo Ávalos
Analista

martes, 27 septiembre 2022 | 06:00

PUBLICIDAD

Las campañas políticas –a pesar de no encontrarnos en tiempo electoral- se presentan en nuestro diario vivir, desde discursos que elevan aquellos que ostentan el poder, hasta entrega y promesas de apoyos para la ciudadanía, actividades con las cuales, los diferentes actores que se encuentran inmersos en la política estatal, intentan ganarse el beneplácito de la comunidad chihuahuense, empezando por Ciudad Juárez, pues saben que, si obtienen la frontera, el resto es ganancia.

En este sentido, durante la asamblea del PAN, celebrada en días pasados, la gobernadora del estado, María Eugenia Campos Galván, solicitó a los militantes de su partido unir fuerzas, pues sería la única manera de que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), no entre a la ciudad de Chihuahua, pero, para que eso se logre, no solo se deben unir fuerzas dentro de Acción Nacional, es necesario involucrar a la derecha del estado –que poco a poco, tiende a cambiar de bando- bajo una misma bandera “mantenerse en el poder”.

Ciertamente, en las pasadas elecciones, a Morena le fue de maravilla al ganar 11 gubernaturas, mismas que son consideradas por el especialista en geopolítica Alfredo Jalife, como estratégicas, empero, no pudo con el estado de Chihuahua, donde se impuso Maru Campos, quien sobre sus hombros trae una carga muy pesada, la cual consiste en ganar la confianza del electorado chihuahuense, sobre todo, de quienes vivimos en Ciudad Juárez, en donde, a la fecha, ha quedado a deber mucho, para muestra, el transporte público sigue siendo de los peores servicios con los que se cuenta en esta localidad.

Se le olvida a la mandataria estatal, que Morena, entró al estado de Chihuahua por la puerta grande, es decir, por Ciudad Juárez, localidad fronteriza que sostiene el liderazgo económico de la entidad, ya que, según lo expuesto por Desarrollo Económico de Ciudad Juárez, actualmente el 50 por ciento del Producto Interno Bruto del estado, es aportado por Ciudad Juárez, de la misma manera, aproximadamente el 52 por ciento, del padrón electoral del estado, se encuentra registrado en Ciudad Juárez, según lo refiere la página oficial del Instituto Estatal Electoral, de donde se desprende que, con fecha de corte al 2021, se encuentran inscritos  un millón 141 mil 972 electores.

Así que, con independencia de que se encuentra en juego la Presidencia de la República, en Chihuahua, Morena y PAN, deben descubrir sus mejores cartas, ya que dependerá de la función que realicen al frente de su gestión, tanto Cruz Pérez Cuéllar en Ciudad Juárez, como Marco Bonilla en Chihuahua capital, para que el electorado chihuahuense elija la mejor opción, y ambos, apoyados en todo momento por la gobernadora del estado, quien no podrá inclinarse a uno u otro, pues sus aspiraciones políticas no se lo permiten y debe apostar por aquello que le permita asegurar el estado de Chihuahua.

Difícil panorama el que se le presenta a Maru Campos Galván, toda vez que, como mandataria estatal, debe trabajar muy de la mano con la totalidad de los alcaldes del estado, en especial, con los presidentes municipales de Ciudad Juárez y Chihuahua capital, independientemente del partido político que los mismos utilizaron para llegar al poder y de la ideología que ellos representan, pues ganarse al electorado es la meta.

Lo anterior, debe lograrse con acciones y determinaciones que pongan en el horizonte político nacional, el nombre del estado de Chihuahua, como una gran alternativa de cambio, los discursos, poco a poco, van perdiendo fuerza para lograr la convicción del ciudadano, ahora se requieren acciones tangibles que permitan a la ciudadanía advertir que, el trabajo realizado por quienes representan a nuestro estado, es el necesario para el desarrollo de Chihuahua y en eso, a consideración de un servidor, le está haciendo falta al ejecutivo estatal, aunque aún es temprano para realizar juicios subjetivos de valor y se espera con ansia, un giro en la manera de hacer política.

Reza el punto número XV del ideario del Pentathlón “que tus manos sean fuertes y duras por el trabajo, más no por los aplausos que tributes a los poderosos”, confiamos en que la política nacional en algún momento de nuestra historia, deberá cambiar, ya que la ciudadanía espera ver trabajo y no solo discursos y buenos deseos.

PUBLICIDAD

ENLACES PATROCINADOS

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

close
search