La discreción de Emma Coronel en Juárez

-La discreción de Emma Coronel en Juárez

-Maru y Loera buscan sentar sus reales aquí

-Requieren las dos firmas del PT

-Los profes tal vez no vayan en alianza

En Ciudad Juárez pudo ser demostrada la fidelidad de Emma Coronel a su marido, uno de los jefes principales del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.

Custodios del Cereso Federal 9, meseros de varios restaurantes y trabajadores de un hotel ubicado por Pérez Serna, fueron testigos durante su estancia aquí de una mujer atenta al esposo, también concentrada en sus gemelas.

La recuerdan sin escoltas más allá del abogado que representó al capo en esta frontera entre mediados del 2016 y enero del 2017 cuando fue extraditado a los Estados Unidos.

“Llegaba, cenaba discretamente y se retiraba. Alguna vez estuvo con sus niñas”, recuerda el jefe de meseros de un restaurante ubicado en el “corredor seguro” de la Gómez Morín.

Ningún desaguisado provocó su presencia en ninguna parte; de hecho ubicaron de quién se trataba hasta ser vista con mayor frecuencia en los medios de comunicación y su posterior activismo en redes sociales ataviada de ropa lujosa.

Emma Coronel era famosa por su porte (31 años de edad), su relación con Guzmán Loera y otros jefes del Cártel de Sinaloa, pero ahora se ha sumado la detención en los Estados Unidos acusada también de complicidad para contrabandear drogas y auxiliar en la fuga de “El Chapo” del penal de Almoloya.

Según el gobierno estadunidense, la cercanía de Coronel con “El Chapo” era utilizada igualmente para asuntos de la organización delictiva, que incluirían los aproximadamente 10 meses de su permanencia en el penal federal de Ciudad Juárez.

Esta otra parte de la aquella historia apenas empieza... desde Washington; en México no hay antecedentes ni policiacos.

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Sigue el atrincheramiento de los principales equipos electorales que van adelantados en la pelea por la Presidencia Municipal de Juárez.

Juan Carlos Loera al frente de Morena por la gubernatura, aun sin definición en la nominación por la alcaldía pero con sus dos principales aspirantes a la postulación bastante hiperactivos por todo el territorio municipal.

Gabriel Flores Viramontes hizo un breve paréntesis por el sentido fallecimiento de su señora madre, pero de inmediato se reactivó en operación con diversos liderazgos morenos y pronunciándose contra la agresión de que fue objeto un reportero de El Diario por parte de escoltas de Javier Corral.

Cruz Pérez Cuéllar, el otro posible candidato de Morena a la alcaldía, anduvo en una cabalgata de San Agustín a El Sauzal. Al menos dos horas trepado en caballo con tal de agarrar condición física ante la eventualidad de que la “encuesta” le sea favorable.

En el otro gran frente tampoco duermen. Maru Campos anduvo en Juárez desde el viernes con el candidato panista a la alcaldía, Javier González Mocken.

Ayer tuvieron encerrona con los candidatos a regidores, en quienes deberá descansar bastante responsabilidad durante la campaña electoral; y sábado, domingo y lunes con líderes empresariales, sociales y candidatos a diputados.

La campaña constitucional se antoja trepidante.

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La firma de la dirigencia estatal del Partido del Trabajo ya no es suficiente ante el Instituto Estatal Electoral (IEE), así que las candidaturas que se andan ofreciendo como pan caliente por toda la entidad no tienen el respaldo legal requerido.

A varios aspirantes les han prometido el cielo y las estrellas mediante candidaturas a diputaciones, alcaldías, sindicaturas y regidurías. Pero ante el IEE se topan con la novedad, que ya casi ni es novedad, de que el aval debe ser con dos firmas, la de la dirigencia y la del comisionado nacional del PT, Luis Carlos Arrieta. Lo advertimos aquí en exclusiva desde que fue nombrado dicho delegado.

Desde hace algunas semanas, esa previsión legal y reglamentaria del PT mantiene atorados los registros de los militantes petistas de la entidad, que han ido a menos los últimos años porque obviamente el negocio del partido no era tener un padrón fuerte ni ganar elecciones.

Pero también están frenados los procesos de alianzas y reparto de candidaturas para las zonas donde el partido irá coaligado con otros, principalmente con uno de los más fuertes, Morena.

Todo esto porque los acuerdos deben tocar base con Arrieta Lavenant, quien después de cuatro meses de haber sido comisionado a Chihuahua por parte de la dirigencia nacional, ya comienza a ser reconocido como tal, como la autoridad dentro del PT.

Quienes tenían tratos con la dirigencia estatal exclusivamente -con lo que asumían tener amarrada alguna candidatura, así fuera para la última regiduría en el municipio más humilde- a ver si luego no se dicen víctimas de fraude.

Por ahora lo que confirman del mismo partido y del IEE es que los aspirantes que estén únicamente viendo a la dirigencia, más vale que toquen puerta también con Arrieta, porque además de dos firmas, también hace falta la validación de la dirigencia nacional.

A ver si no se caen candidaturas en estos días.

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Con el interés de preservar los derechos magisteriales ganados en la entidad, la Sección 42 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y sus principales liderazgos encabezados por Ever Avitia tal vez no vayan en la coalición que Nueva Alianza (Panal) ha formado con Morena.

Tanto el líder sindical como el exdirigente de la 42, el hoy diputado René Frías Bencomo, tienen mayor cercanía y apertura con la amplísima ala que respalda la candidatura de María Eugenia Campos (PAN-PRD), en vez de tenerla con la otra coalición (Morena-PT-Panal).

La otra opción política para el magisterio estatal está vedada: Redes Sociales Progresistas (RSP), de la maestra Elba Esther Gordillo, cuya relación con el SNTE está por demás deteriorada; además sus causas ya no son las que fueron hace mucho tiempo.

A los profes estatales les preocupa el futuro de Pensiones Civiles del Estado, echado por la borda desde hace varios sexenios, así como el regateo de sus logros sindicales, el maltrato general y el deterioro de sus condiciones laborales.

No son los profes, además, una fuerza política irrelevante como para que así quieran pintarlos los partidos en sus escuálidas alianzas. Son una fuerza activa más poderosa de lo que se cree y no están sometidos a designos del Panal... menos de RSP.

Hay que seguir con detenimiento el camino que tomen los maestros del subsistema estatal, ahí puede haber algunas claves de la contienda entre los coaligados en “Juntos Haremos Historia” y los de “Nos une Chihuahua”.