Cómo construir la Paz en nuestra querida Ciudad Juárez

Cuarta parte de seis

Ciudad Juárez ha sido históricamente conocida como un lugar de oportunidades donde sus habitantes son gente trabajadora. Sin embargo, junto con el problema de las avenidas y el problema de los frecuentes homicidios diarios, el entorno escénico no ayuda en nada a nuestra querida ciudad. La falta de un saneamiento más efectivo, la falta de un mantenimiento de los miles de parques que existen, la mayoría de ellos en abandono a lo largo y ancho de la ciudad, y el hecho de que nuestra ciudad conforme al número de habitantes sea la que tenga más automóviles a nivel México, constituyen problemas de primer orden que en nada ayudan a una paz interna y mucho afectan al ambiente en que nos desenvolvemos. 

No se puede hablar de una Ciudad Juárez como un sustento de ciudad avanzada en los últimos treinta años como lo han hecho, y la evidencia no necesita comprobación: Aguascalientes, León, Guanajuato, Chihuahua, Querétaro, San Luis Potosí y Puebla. Las comparaciones son odiosas, pero hablar de nuestra ciudad junto a las urbes antes citadas es admitir el retroceso en que se encuentra nuestra frontera.

En los años sesenta, se trabajaban números alegres donde se exponía la primera frontera de México, Ciudad Juárez, como la cuarta ciudad en importancia del país después del entonces Distrito Federal, Guadalajara y Monterrey. Según el último reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), nuestra querida ciudad se encuentra en el distinguido octavo lugar después de Ciudad de México; Monterrey, que ya le ganó a Guadalajara el segundo lugar en importancia; Guadalajara en tercero; el cuarto lugar es Tijuana, que ya se puede mencionar como la frontera más importante del norte de México; el quinto es Puebla; el sexto, Querétaro; el séptimo, León, Guanajuato; y el octavo, la ciudad donde vivimos. El noveno, La laguna, que incluye Torreón, Gómez Palacio y Lerdo; y el décimo lugar lo ocupa San Luis Potosí. 

Si a todo lo anterior le agregamos la llegada de migrantes de otros países y el tiempo que tardan en la adecuación y adaptación en nuestra ciudad, los fenómenos multifactoriales que afectan a la ciudad donde residimos son verdaderos elementos que necesitan una atención muy a fondo y no soluciones superficiales que ya nos dimos cuenta no han sido soluciones favorables.

Dicho esto, y dadas las condiciones no muy favorables para el mantenimiento de una salud mental y un estado de paz sostenido entre los habitantes de la localidad, resulta entonces indispensable, como ciudadanos cuando menos, abrir la conversación en torno a temas como la paz y educarnos en el tema de la Cultura de Paz, así como también permitirnos generar reflexiones y compromisos alrededor de la atención de asuntos relacionados con la violencia, resolución de conflictos y la construcción de mejores escenarios para los y las juarenses.

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Cultura por la Paz es un proyecto de El Diario de Juárez en alianza con el Tecnológico Nacional de México, campus Juárez;  el Comité de Pacificación  y Bienestar Social (Copabis), y el Centro Familiar para  la Integración y Crecimiento A. C. (CFIC).