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Opinión

121 mil 600 homicidios

La tendencia a la baja que se dio en el verano del año pasado no es más que un viejo recuerdo de un registro que se analizó mal, al no incorporar el confinamiento por la Covid-19

Raymundo Riva Palacio
Periodista

martes, 21 junio 2022 | 06:00

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Ciudad de México.- Oficialmente, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo que reconocer, sin decirlo abiertamente, que en sus tres años y medio los homicidios dolosos sumaron más que el total durante los seis años del gobierno de Felipe Calderón. La tendencia a la baja que se dio en el verano del año pasado no es más que un viejo recuerdo de un registro que se analizó mal, al no incorporar el confinamiento por la Covid-19. Estamos con niveles de asesinatos como no se habían tenido en 11 meses, y por los síntomas vistos en junio, una prospectiva alentadora parecen estar fuera de discusión.

Veamos:

Lunes 20 de junio: “Una noche de terror”, como describió el periódico Expreso de Hermosillo, se vivió en el destino turístico de San Carlos, en Guaymas, donde se registró una balacera que provocó un saldo de un muerto, un herido y al menos seis lesionados.

Domingo 19. Por la madrugada, Matamoros amaneció bajo el fuego, con bloqueos e incendios en toda la ciudad por varias horas, reportó el diario El Mañana. Por la tarde se informó que habían asesinado a una familia en el Centro Histórico de Zacatecas. Y por la noche, atacaron con metralla el penal de La Pila en San Luis Potosí. En Guaymas, un grupo armado irrumpió en una fiesta y asesinó a tres personas. Sólo este domingo se cometieron 96 homicidios dolosos, la mayor cifra en el mes.

Jueves 16: Un grupo armado se metió a un conocido y popular restaurante en Ciudad Juárez y mató a cuatro personas. En Morelia asesinaron a cinco miembros de la misma familia. El Departamento de Estado actualizó su alerta de viaje para México y recomendó no viajar en absoluto a cinco estados y tener mucha precaución en otras 25, clasificando a este país como “riesgoso”. Sólo Campeche y Yucatán, por donde no hay trasiego de drogas, armas o trata, pasaron la prueba de la revisión.

Miércoles 15: Asesinan a una regidora en Bácum, Sonora, sumando a la lista de más de 80 políticos muertos en actos de violencia.

Martes 14: Un grupo armado atacó a agentes de la Fiscalía del estado de México en Texcaltilán, que dejó un saldo de 10 muertos. En San Agustín Loxicha, Oaxaca, asesinaron a un expresidente municipal. En un fraccionamiento en Playa del Carmen, Quintana Roo, asesinaron al inspector de Protección Civil. Y en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, dos grupos se enfrentaron por horas por el control del mercado del Norte, donde se venden armas, drogas y contrabando.

Los criminales tienen licencia gubernamental para matar. Las fuerzas federales no sirven para nada. No sirven como grupo de disuasión y prevención del crimen, y cuando se han llegado a encontrar en una situación de violencia delincuencial, los corretean y los hacen huir los criminales porque las instrucciones son que no los combatan.

La violencia es abrumadora, y por ende, inocultable. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana dio a conocer ayer su informe, que muestra el deterioro que se vive. De abril a mayo, el incremento en homicidios dolosos fue de 10.9%. De todo el sexenio de López Obrador, este mayo fue el 24 peor mes en violencia que se ha vivido, para totalizar 121 mil 642 homicidios dolosos en tres años y medio de administración, contra 120 mil 463 en todo el gobierno de Calderón.

El gobierno insiste que la violencia está focalizada en una quinta parte del país y generada por los enfrentamientos entre organizaciones criminales. Sin embargo, los datos aportados en el informe muestran un descontrol más generalizado del que quieren admitir, y que está asociado a la impunidad con la que se manejan los delincuentes. 

López Obrador no modificará el rumbo, y como lo dejó entrever la semana pasada, espera a que un cártel gane la guerra y que al pacificar al país, y le hagan su trabajo. Hoy no se ve claro que eso sucederá, y delitos como homicidios dolosos y aquellos directamente asociados a ellos, probablemente continuarán creciendo, proporcionalmente al descrédito del presidente. El mayor, el mensaje que su inacción contra el crimen organizado y la tendencia a proteger al Cártel de Sinaloa, obedece a un pacto con el Cártel de Sinaloa. López Obrador lo niega vehementemente, pero hasta ahora no ha hecho nada por cambiar la percepción.

rrivapalacio@ejecentral.com.mx

twitter: @rivapa  

 

 

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