Nuevo Casas Grandes

Con graves carencias albergues de migrantes

Siguen recibiendo gente a pesar de la escasez de recursos

Viridiana Chairez Loya/El Diario

martes, 19 noviembre 2019 | 12:56

Nuevo Casas Grandes.- En la región se cuenta con varios albergues, en donde se reciben a familias de jornaleros migrantes, en los cuales se cuenta con área para que los niños migrantes reciban educación, sin embargo estos centros educativos tienen distintas carencias, como falta de baños, espacios mejor acondicionados para recibir educación, entre otras. 

Alrededor de 400 niños migrantes son los que se reciben cada año, en la región desde Buenaventura hasta Ascensión, ellos se encuentran dentro de los albergues con sus padres quienes laboran en campos agrícolas, la mayoría son personas provenientes del Sur.

Estos albergues son facilitados por Gobierno, y deberían de contar con apoyos de los tres niveles de gobierno. 

Cada año, quienes arriban a esta región a trabajar en los campos agrícolas, son familias completas, y los hijos de los jornaleros migrantes son atendidos por el programa de atención educativa de la niñez migrante, así lo dio a conocer Flor María Vargas, coordinadora del mismo. 

Así mismo, informó que en estas fechas, ellos se retiran y regresan hasta el mes de marzo, por ello el ciclo agrícola es diferente al ciclo escolar regular, debido a que el ciclo agrícola inicia en el mes de marzo y termina en noviembre, porque las familias de jornaleros migrantes se retiran la mayoría a sus lugares de origen o bien cambian de residencia a otros estados.

En entrevista para este medio, la coordinadora del programa de atención educativa a niñez migrante, Flor María Vargas, respondió que estos centros educativos no cuentan con todo lo necesario, “tenemos muchas carencias, como la población es muy marginada, a los padres de familia no les podemos pedir que nos apoyen, ellos vienen a trabajar y trabajan de sol a sol, de lunes a sábado, en algunos caso hasta el domingo”, comentó. 

Cabe mencionar, que trabajan tanto el padre como la madre de familia, incluso los hijos más grandes son llevados a trabajar también en los campos agrícolas, y regularmente los más pequeños son quienes acuden a recibir clases. 

“Nuestras escuelas algunas tienen recurso, otras no, pero depende mucho de la disposición de las autoridades municipales”, expresó.

En este sentido, dijo, que el municipio de Ascensión y de Nuevo Casas Grandes, son los municipios de la región que más apoyo dan a estos centros educativos, o bien a los albergues donde se encuentran las familias jornaleras. 

Pero existen otros, como Galeana, Janos, Buenaventura y Casas Grandes, que es menor o nulo el apoyo que aportan. “Ahí no es bueno el apoyo que tenemos por parte de las autoridades”.

Las instalaciones de los albergues o de las aulas donde se desarrolla el programa, es necesario procurar que estén en buen estado, hay lugares donde no tienen baño las escuelas, no se ha logrado acondicionar con todo lo necesario. 

Flor María Vargas, explicó que estas escuelas, no son del sistema educativo regular, que no se levantaron con recursos de educación por la circunstancia de que los niños están migrando. 

Aunado a ello, indicó que trabajan en áreas móviles en algunos casos, o aulas que han sido prestadas por ejidatarios, y resaltó “sí tenemos carencias”, esto debido a que muchas de estas escuelas para niños migrantes no cuentan con baños, o servicio de agua y luz.

En algunos municipios, la escuela se encuentra dentro del área donde está el albergue, pero solo hay baños comunes, pero las maestras manifiestan que es necesario contar con baños que solo sean para los infantes.  

Aseguró que tratan de mejorar la gestión, pero que ha sido muy complicado, la coordinadora del programa en mención, aquí en la región, comentó que como institución solo se busca procurar la educación para los niños migrantes, con los recursos y limitaciones que se tienen. Sin embargo, tienen carencias en las instalaciones que son utilizadas para ello. 

Por otra parte, agregó que cada aula móvil cuesta alrededor de medio millón de pesos, nuevas, pero una vez que se colocan tienen que recibir mantenimiento, “el programa de atención educativa a la niñez migrante paga a los maestros, el material, y todo lo que implica el funcionamiento, se da constante capacitación a los maestros pero el tema de mantenimiento a las aulas, y otros servicios como el agua y la energía eléctrica se quedan rezagados, todavía hay mucha xenofobia, es el odio por el diferente, por el que viene de una cultura diferente, chihuahua somos una población, xenofobia, tenemos muchas actitudes de rechazo a los indígenas y más a quienes vienen del sur, es un impedimento para poder lograr que se solidariza la comunidad”, expresó Flor María Vargas.

Cabe señalar, que durante un evento que se tuvo el pasado fin de semana denominado “Omáwari Migrantes 2019”,  en el cual estuvieron presentes autoridades municipales de Nuevo Casas Grandes, algunas madres de familia se acercaron con el Alcalde Héctor Mario Galaz, para solicitar su apoyo en la construcción de baños para los niños en la escuela de migrantes ubicada en la comunidad de Ejido Hidalgo, a lo cual el presidente municipal se comprometió a hablarlo con el departamento de Obras Públicas, para que se tome en cuenta para el próximo año 2020. 

Es importante mencionar, que aun cuando las aulas que son utilizadas para la educación de los niños migrantes, no se encuentran en óptimas condiciones, ni cuenten con todo el apoyo por parte de autoridades municipales en la región noroeste del Estado, se siguen recibiendo a los niños migrantes buscando ofrecerles actividades educativas haciendo uso de materiales y recursos posibles. 

Por el momento, la mayoría de los centros educativos migrantes de la región se encuentran vacíos, ya que las familias jornaleras migrantes regresan a esta zona hasta el próximo mes de marzo. 

vchairez@ncg.diario.com.mx

close
search