Truncan sueños de Christian

Ciudad Juárez.— A sus 12 años, Christian Omar Zúñiga Morales quería ser policía para lograr la paz en Ciudad Juárez, pero la tarde del jueves 11 de agosto él perdió la vida y su papá quedó herido con ocho impactos de bala en el cuerpo, durante una serie de ataques que un grupo delictivo cometió contra la población. 

Ambos fueron heridos en una tienda de conveniencia ubicada en la colonia Melchor Ocampo, junto a dos personas más, pero Christian murió horas después en el Hospital Regional de Zona número 35 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de donde ayer salió su padre sólo para despedirlo. 

“La tienda la trabajaban sus papás y él ese día se fue con su papá, como estaba de vacaciones él quiso acompañar a su papá. Su papá está bien, a pesar de tanto balazo que tiene, él tiene ocho balazos, nada más que las balas no le tocaron ningún órgano, le quedaron en los brazos y las piernas, le tuvieron que reconstruir su brazo. Ahorita acaban de avisarnos que lo acaban de dar de alta para que venga a despedir a su niño, pero regresando del entierro se va internar otra vez”, dijo ayer la familia, la cual tuvo que firmar un pagaré en blanco para que pudiera ser recibido en el IMSS, debido a que no contaba con seguridad social. 

Christian era el segundo de cinco hijos, era el único hombre y también el único nieto varón de la familia, por lo que ayer sus cuatro hermanas y primas menores de edad vistieron de blanco para despedirlo. 

“Era un niño alegre”, el 21 de octubre cumpliría 13 años de edad y estaba contento porque el próximo 29 de agosto iba a entrar a segundo grado en la Secundaria Técnica número 73; “era de los Toros”             , recordaron mientras velaban su cuerpo dentro de un ataúd de color gris, rodeado de flores y junto a una imagen en la que se observaba al menor con su tímida sonrisa. 

Recordaron que su sueño era ser policía, hasta que se convirtió en la onceava víctima de los ataques cometidos por el grupo criminal Los Mexicles contra la comunidad. 

Gobierno del Estado y el Municipio se encargarán de los gastos funerarios, aseguraron quienes decidieron despedir al menor en una ceremonia privada. 

Los ataques del jueves 11 de agosto iniciaron a la 1:27 de la tarde en el Centro de Reinserción Social número 3 (Cereso), cuando “se tuvo conocimiento de una agresión en el módulo 2 de este centro penitenciario donde grupos delictivos identificados como Los Chapos fueron atacados por un grupo rival denominado Los Mexicles, generando una riña al interior de este centro penitenciario, resultado 20 internos lesionados, cuatro de ellos por proyectil de arma de fuego, el resto por golpes y contusiones, así como dos personas privadas de la libertad muertos por proyectil de arma de fuego”, informó la mañana del viernes el subsecretario de Seguridad Pública de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja. 

Dijo que se logró el control en el centro penitenciario a partir de la actuación de las fuerzas municipales, estatales y federales, pero Los Mexicles comenzaron a emprender acciones de disturbio y agresiones contra la población civil en Ciudad Juárez, que provocaron la muerte de nueve personas más, por lo que en total sumaron 11 personas muertas y 12 heridas por parte del grupo criminal. 

“Los niños no se tocan”, “Dios te bendiga niño hermoso”, “¿Por qué los niños?, ¿el niño qué tuvo que ver con esas personas malas?, gente que no se tienda el corazón para hacer cosas malas”, “No entiendo qué pretende al hacer tanto daño, son personas inocentes y le dan fin a su vida sin compasión. Que Dios los perdone”, manifestaron los juarenses a través de redes sociales, junto a cientos de imágenes de ángeles en honor a Christian, cuando se enteraron de su muerte.