Regresaron sicarios para eliminar a madre e hija: luchador Takeda

Ciudad Juárez.- El luchador profesional juarense Takeda, utilizó su perfil de Facebook para desahogar el dolor tras la pérdida de su hija Vianney, quien fue ejecutada el pasado domingo junto con su esposo Ezequiel, comandante de Operaciones Tácticas de la Agencia Estatal de Investigación (AEI).

“Si me permiten un breve desahogo. Les contare la verdad de como fueron assesinados a sangre fria y cobardemente mi hija  Vianney Blanton y su esposo Ezequiel Ortiz. (Comandante de la Minestirial del Estado de Chih.) Dejando huerfano a mi nieto Giovanny de 9 años de edad, quien es de cuidados especiales y tiene autismo (sic)”, publicó en su cuenta el gladiador fronterizo.

De acuerdo con su narrativa de lo ocurrido, el pasado Domingo de Pascua, al abordar su hija y su yerno la camioneta, fueron emboscados por varios sicarios a bordo de dos vehículos.

“Donde mi yerno (quien fue el blanco) le dieron mas de 40 impactos matandolo casi al instante. Mi hija Vianey alcanso a esqivar los primeras rafagas y al bajarse de su troca y al intentar darle auxilio a su esposo. Su madre al escuchar el peligro en el que estaba su hija salio a intentar rescatarla. Pero los sicarios se regresaron para eliminarlas al verlas tratar de rescatar a mi yerno Pero el esposo de la madre de mi hija al ver que los sicarios se regresaban Les grito que corrieron. Pero ya era demaciado tarde. (sic)”, se lee en el texto que acompaña a tres fotografías en las que aparece la pareja fallecida, junto a su hijo.

Agregó que “Los asesinos le abrieron fuego a 2 inocentes desarmadas madres. Mi hija al ver a su madre sin protecion, la tacklio al suelo y la escudio con su cuerpo Recibiendo los impactos que le arrebataron su vida  (uno en su cabecita) Su madre nomas recibo 3 impactos de bala en su pierna izquierda. (sic)”.

Escribió que los asesinos soltaron otra ráfaga en dirección al esposo de la madre de su hija, sin embargo ninguna bala lo alcanzó, aunque quien estaba parado cerca de la puerta del domicilio y que posiblemente vio como daban muerte a sus padres, fue su nieto.

“Milagrosamente no le paso nada, los impactos pasaron al su arededor (sic)”, refirió.

Manifestó que “Jamas havia sentido yo tanto odio y impotencia como el que senti ese dia.

Pero cuando mas dolor senti… Senti el calor del amor de mi hija me acobijaba. Como si me dijiera: "Papi, estoy bien, estoy con Dios y con mi abuelita" "Perdonelos papi. Dios lo hace, ud tambien" (sic)”.

En la misma publicación, Takeda cuenta un poco de como era su hija Vianney, quien era licenciada en Derecho, pero por cuidar a su hijo con autismo, se dedicó a sus cuidados y al hogar.

La recordó como una mujer con empatía hacia los animales, a quienes no dudaba con alimentar.

“El instinto de ella era ayudar, proteger y siempre dar lo mejor de ella para su progimo. Tenia una inolvidable y calorosa sonrisa llena de amor que nunca dejaba de relumbar Y nunca dejaba de sonreir por muy mal que ella se sintiera o estubiera por dentro (sic)”, subrayó su padre.

Concluyó al escribir “Le doy gracias a nuestro Dios, todo poderoso por verme dodo una hija tan maravillosa que tanto me dio y que tanto me enseño con una simple sonrisa que siempe estaba llena de  amor. Que En Paz Descansen mis hijos, nunca los dejare de amar, cada instante mi amor por uds crece. (sic)”.