Recibe contadora juarense presea por su labor

Ciudad Juárez— La Presea Nacionalista al Contador Público Distinguido fue otorgada este año a la juarense María del Rosario Valadez Aranda, quien forjó su carrera en el Instituto Tecnológico de Ciudad Juárez (ITCJ) a inicios de la década de los 90; con el paso del tiempo ha incursionado en la docencia, la política e incluso como entrenadora de basquetbol.

La Federación Nacional de la Asociación Mexicana de Colegios de Contadores Públicos reconoce anualmente el mérito del contador público más distinguido del país por su entrega profesional, por actualizarse de manera constante, formar a nuevas generaciones de profesionistas y haber tenido mayor participación social.

“Quiero darle las gracias a mi madre hasta el cielo porque fue la que me impulsó a trabajar arduamente y a estudiar esta maravillosa carrera que tantas gratificaciones me ha dado”, dijo María del Rosario durante la entrega, realizada en el marco de la XLVII Convención Nacional de la Contaduría Pública Mexicana que se celebró en el estado de Nayarit.

Actualmente, María del Rosario es docente del ITCJ y miembro de la asociación civil Fuerza Liebre, integrada por egresados del Tec y que año con año reconoce los méritos de cada uno de sus estudiantes, e incluso los apoya económicamente por medio de becas para cubrir los gastos de su carrera profesional. 

Valadez Aranda egresó del ITCJ con la generación 1992 y continuó su maestría de Impuestos en 2002; además, en 1997 fue organizadora de la Convención Nacional de la Contaduría Pública Mexicana, celebrada en esta ciudad, y recibió a las y los contadores públicos más distinguidos de la federación, colegios y asociados. 

“Me siento muy contenta y muy orgullosa porque siempre es algo muy bueno recibir este tipo de reconocimientos en vida, al saber que vas por el camino correcto y que tus propios colegas te reconozcan y te den este tipo de galardones es muy importante para mí como contador público”, manifestó la galardonada. 

En sus inicios, María del Rosario quería estudiar Administración de Empresas, pero en la preparatoria, cuando eligió su especialización, no había espacio y como segunda opción encontró Contaduría; ahí descubrió que se trataba de una profesión que le apasionaba. 

Su carrera como contadora la lleva de la mano con ser entrenadora de basquetbol, un deporte en el que incursionó durante la secundaria; hace 15 años comenzó a practicar con estudiantes al llevarlas a un campeonato nacional y con el tiempo hizo del basquetbol su principal hobby en equipos profesionales de Ciudad Juárez. 

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