Rarámuris salieron a ejercer sus derechos

Después de caminar bajo una temperatura de 36 grados centígrados (97 grados Fahrenheit) entre las faldas de la Sierra de Juárez, la rarámuri María Enerina Orpinel Moreno, de 66 años de edad, mostró ayer orgullosa su dedo pulgar marcado tras ejercer su derecho al voto.

Vestida con su vistoso traje tradicional, en color rojo floreado, y protegida del Covid-19 con un cubrebocas, la habitante de la colonia Tarahumara de Ciudad Juárez llegó hasta la casilla 2057 acompañada de su esposo, su hija y su yerno.

Luego de caminar cerca de un kilómetro de la colonia Tarahumara hasta la casilla ubicada en la escuela secundaria Montesinos, en lo alto de la colonia Gustavo Díaz Ordaz, cada uno de ellos buscó el salón en el que le tocaba votar de acuerdo con su apellido. 

La primera en votar fue su hija, Herminia Candelaria, quien después guio a su madre hasta su casilla. Al ingresar, los funcionarios asignados por el Instituto Nacional Electoral (INE) le colocaron gel antibacterial, revisaron su credencial para votar y luego le entregaron las papeletas para que eligiera a quien desea que sea el próximo gobernador de Chihuahua, el presidente municipal de Juárez, el síndico municipal y los diputados y regidores.

Para poder ejercer su voto, la rarámuri pidió el apoyo de su hija Herminia, a quien los funcionarios de casilla le dieron acceso para que ayudara a su mamá, y luego ellos mismos guiaron a María Enerina para que colocara cada papeleta en la urna correspondiente, según el color.

La originaria de Norogachi, municipio de Guachochi, Chihuahua, dijo que tiene “muchos años” viviendo en Ciudad Juárez y aseguró que siempre acude a votar para poder decidir quiénes serán sus próximos gobernantes, por lo que le pidió a los juarenses que ejerzan también su derecho. 

Después de elegir a quienes quieren como representantes, ambas levantaron su dedo pulgar, para mostrar emocionadas que ya habían votado. 

Otros habitantes de su comunidad acudieron igualmente a emitir su voto hasta la escuela secundaria en donde los juarenses que apoyaron en estas elecciones se encargaron de mantener la sana distancia, dar gel antibacterial a los votantes y limpiar con aerosol desinfectante la casilla de votación cada vez que salía una persona.

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