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Juárez

Día internacional de la mujer

‘Marea violeta’ demanda justicia

Cientos toman las calles del Centro para exigir alto a la violencia de género

S. Rodríguez / A. Gómez / El Diario

miércoles, 09 marzo 2022 | 10:48

Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Fueron hasta 5 mil las participantes y el saldo blanco, informaron autoridades Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Llegada a la Cruz de Clavos en el puente Santa Fe Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Menores fueron llevados en carriolas Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Una cruz negra, símbolo de agresiones hacia ellas Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Uno de los contingentes Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | Banderas rosas ondearon en el Monumento a Juárez antes de la marcha

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Entre nubes de humo color morado, miles de mujeres, entre adultas y niñas, la gran mayoría portando alguna prenda color violeta como blusas, cubrebocas o cartulinas con consignas, tomaron las calles de la zona Centro la tarde de ayer y se reunieron al pie de la cruz de clavos, donde la consigna “Ni una más, justicia para todas las víctimas de feminicidio” fue plasmada en exigencia a un alto a la violencia de género.

El contingente fue encabezado por madres y familiares de víctimas de feminicidio y mujeres desaparecidas, así como de víctimas de violación.

Las protestantes pasaron por el túnel que dirige a la avenida Juárez, ahí, bajo las calles de la zona Centro, continuaron entonando numerosas consignas y el eco de sus exigencias se escuchaba en la superficie: “¡Vivas se las llevaron / vivas las queremos!”. 

 “Protesto porque cuando le pasó a mi hija, le llamaron mentirosa y el culpable sigue libre”, decía el mensaje que portaba en alto Mariana López, de 28 años y madre de una niña víctima, de seis.

“Violación agravada”, dijo López conteniendo el llanto, cuando se le preguntó por el delito que denunciaba. Ocurrió en mayo, dijo, “y hasta ahorita no han hecho nada”. 

Sobre la avenida Juárez, frente a la cruz de clavos colocada a manera de memorial contra el feminicidio y que se ha convertido en una de las principales características de esta frontera, López señaló que la de ayer era su primera manifestación con motivo del Día Internacional de la Mujer. 

“Sólo las veíamos pero no participábamos. Sólo hasta ahora (venimos), a pedir justicia”, dijo.

Las consignas retumbaban a través del altavoz, coreadas por las integrantes de la que es una de las manifestaciones más numerosas registradas en esta ciudad: “Señooor, señora / no sea indiferente / se mata a las mujeres en la cara de la gente”, o “mujer, escucha / esta es tu lucha”. 

En esa punta de la marcha, frente al puente internacional Santa Fe o Paso del Norte, estaba también Mónica Corona, hermana de Kezaline, asesinada en 2019, cuando los agresores también privaron ilegalmente de la libertad a su padre, Francisco. 

“Lo seguimos buscando todavía”, dijo Mónica, que sostenía con una mano una cartulina a la que le pegó las fotografías de sus familiares y la denuncia de que van ya “dos años y nueve meses de impunidad”. Con la otra sostenía una cruz rosa con el nombre de su hermana, cuyas mejores amigas también la acompañaban. “Somos el grito de las que ya no están”, decía su mensaje.

Los acordes de una guitarra se escucharon a las 17:30 horas, cuando una de las asistentes empezó a interpretar la ya icónica “Canción sin Miedo”, que las manifestantes cantaron al unísono con el puño en alto y algunas, como Karen, entre lágrimas. 

‘Perdí dos amigas’

“Perdí dos amigas y a un familiar. A una la encontraron degollada en el Arroyo de las Víboras. Era mi amiga de la infancia”, dijo la mujer de 27 años y que pidió ser identificada sólo por su primer nombre. 

Al caer la tarde, las mujeres volvieron a retomar su marcha rumbo al Monumento de Benito Juárez, donde iniciaron, y en el camino el grito de sus exigencias se alzó por encima del ruido de cada uno de los locales de la zona Centro. La música de los bares y los anuncios de los comerciantes fueron sobrepasados por la marea que en el Día Internacional de la Mujer inundó las calles.

Una mujer con el rostro cubierto leyó entonces un pronunciamiento, señalando que habían tomado el espacio público organizadas a través de diversas “colectivas” como Celestina Radical, Mujeres que Luchan Juárez, Juárez Feminista y otras. 

“Resistimos contra el poder de dominación que promueve políticas de control, precarización y explotación de las que somos víctimas en todos nuestros espacios: doméstico, laboral y social”, leyó la activista, que pidió ser identificada como Abigail. 

Nada que festejar

“Este 8 de marzo no hay nada qué festejar, no hay nada qué festejar porque siguen los asesinatos de mujeres, las mujeres siguen desapareciendo (…) vamos a levantar la voz, que no se queden calladas las mujeres que son violentadas, las familias de las mujeres que les han quitado la vida, las madres de las jóvenes que están desaparecidas”, dijo Martha Rincón, madre de Esmeralda Castillo, desaparecida desde 2009, hace ya 12 años, mientras en sus manos sostenía una gran bandera rosa.

En su camino a la cruz de clavos, las mujeres lanzaron el grito de “Vivas nos queremos”, además portaron entre sus manos carteles en los que plasmaron cada una de sus exigencias al Gobierno, como el derecho a salir a las calles sin temor, el derecho a poder decidir sobre sus cuerpos y tener acceso a un aborto seguro, legal y gratuito.

Poco antes de las 18:00 horas, el contingente avanzó sobre la avenida Juárez en dirección al sur, sosteniendo en alto sus pancartas y gritando las consignas: “Ni una más / ni una más”.

La Coordinación General de Seguridad Vial reportó un aproximado de cuatro mil a cinco mil participantes, con saldo blanco.

Un agente de la misma corporación comentó que la avenida quedó completamente cubierta de manifestantes, desde el puente internacional hasta más allá del túnel a la altura de la calle Abraham González.

Por ahí caminaron en su regreso al punto de partida, no sin antes dejar escrito con spray en una de las paredes del paso a desnivel el nombre de una juarense que también fue activista feminista: “Isabel vive”. (Sandra Rodríguez / Alejandra Gómez / El Diario)

srodriguez@redaccion.diario.com.mx

agomez@redaccion.diario.com.mx

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