Juarense se suma al Gobierno federal para combatir adicciones

Fabián García nació en el núcleo de una familia sin adicciones, que asistía a la iglesia cada semana y algunos integrantes se dedicaban a la docencia, Fabián no creció con un mal ejemplo. Sin embargo, en su adolescencia tuvieron que mudarse a una colonia de Ciudad Juárez con mucho pandillerismo; y ahí conoció las drogas. Primero fue la marihuana a los 15 años, después fue la cocaína, el cristal y otras sustancias sintéticas con apenas 22 años.

Truncó su carrera en Ingeniería Electrónica, perdió su empleo, abandonó a su hija y a los 25 años comenzó a inyectarse heroína y cocaína casi en calidad de calle. Así comenzó su infierno.

“Toda mi juventud estuvo marcada por la adicción… Estuve muerto por años, es una muerte interior lo que uno experimenta”, relata Fabián.

De acuerdo con estadísticas oficiales, presentadas en el mes de diciembre del 2019, se estima que una vez por semana 39 mil juarenses, de los 12 años en adelante consumen drogas, es decir, el 3.3 por ciento de la población.

A lo largo de 23 años, Fabián ha sido parte de los números que azotan las cifras de adicciones en su lugar de origen, Ciudad Juárez. A pesar de que por temporadas había intentado dejar por completo el consumo de drogas, tuvo varias recaídas que lo hicieron volver a perder absolutamente todo. Durante su juventud, Fabián fue internado varias veces por su familia, pero después de un tiempo de haber salido retomaba el consumo.

“Cuando una persona es diagnosticada con diabetes se tiene que cuidar, tiene que hacer dieta, evitar los refrescos, cambiar sus hábitos. Las adicciones son una enfermedad, y cuando yo salía de los anexos no me cuidaba como un enfermo debe hacerlo; yo salía y volvía al mismo barrio, frecuentaba los mismos lugares, con las mismas compañías. Aunque no consumiera luego luego, al poco tiempo ya había recaído”. 

Durante las temporadas que lograba mantenerse alejado de las drogas, Fabián conseguía avanzar en su vida: fue Policía Municipal de Ciudad Juárez durante 6 años, estudió la carrera de Derecho, tenía una casa estable, auto, cercanía con su familia y salud física.

Pero tuvo que volver a tocar fondo para darse cuenta de que la recuperación era mucho más que eso.

“Se trata de sanar. La verdadera recuperación es algo interno; es un despertar de un ‘yo’ de hacer consciente que no se necesita nada externo para estar bien. La salud, el trabajo, la familia y el dinero vienen por añadidura, pero lo más importante es lo interno. El mejor regalo que me ha dado estar sobrio, es mi consciencia”, señala.

Por un error con sus documentos, no ha podido ejercer la abogacía, pero mientras las autoridades correspondientes le solucionan la liberación de su título, Fabián tiene dos empleos: por las tardes es Gerente del conocido restaurante “Barrigas”, y en las mañanas 

es parte del equipo de la Estrategia Nacional para la Prevención a las Adicciones (ENPA) que arrancó en Ciudad Juárez el mes de diciembre del 2019.

“Yo mucho tiempo soñé con que llegara una ayuda a mi ciudad… Si ahorita hay una

epidemia en China y Europa por el coronavirus, en Juárez siempre ha habido una epidemia que ha matado a más gente que allá: las drogas”.

Dentro de las actividades que más goza Fabián, está leer el diario todos los días. Es así

como leyó varias notas en el periódico en donde la Delegación Federal de Programas para el Desarrollo en Chihuahua anunciaba que estarían trabajando para combatir las adicciones en Ciudad Juárez. Así que, en noviembre de 2019, tomó los datos necesarios y decidió presentarse en uno de los centros en donde se estaba trabajando el programa de adicciones ENPA para dejar su Currículum Vitae y ofrecer su experiencia vivencial y profesional. Una semana más tarde, Fabián fue invitado a participar en el programa, y en un tour por los anexos conoció a Noé Terrazas, Encargado del programa en Chihuahua.

“Fabián es parte fundamental del equipo, porque aporta su experiencia para que entendamos las necesidades reales que tienen las personas que viven con esta problemática de salud. Su vivencia en el territorio es indispensable para mejorar la forma en la que nos acercamos a la gente, él es sensible a sus problemas y al proceso que están viviendo. Para el equipo, Fabián es un pilar fundamental”, platicó Noé Terrazas.

Hasta ahora la Estrategia Nacional para la Prevención a las Adicciones, en Chihuahua, ha atendido a 700 personas y ha colaborado con 24 centros de tratamiento en adicciones para fortalecer sus servicios y poder adherirse al plan nacional.

Al día de hoy, Fabián García se confiesa apasionado de ayudar a quienes quieren recuperarse de las adicciones, está luchando por dedicarse de lleno a acompañar a otras personas que están sufriendo lo que un día él padeció.

Acaba de tener a su segundo hijo, está construyendo una casa para vivir ahí con su esposa y su bebé; también ha logrado recuperar su relación con su primera hija, cambiar sus compañías y cada que tiene tiempo libre, asiste a las juntas en los anexos. Esto le permite compartir su historia con personas que padecen adicciones, que están en rehabilitación y que se mantienen recuperadas.