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Juárez

Han atendido en gimnasio a 2 mil 536 migrantes

De al menos ocho distintas nacionalidades, hasta el 12 de julio

Hérika Martínez Prado
El Diario de Juárez

viernes, 16 julio 2021 | 06:00

Hérika Martínez Prado / El Diario de Juárez | El sitio fue habilitado hace poco más de tres meses

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Ciudad Juárez— Desde que abrió sus puertas como albergue filtro el pasado 5 de abril, el gimnasio municipal “Kiki” Romero ha recibido a un total de 2 mil 536 personas migrantes de al menos ocho distintas nacionalidades, hasta el 12 de julio.

El espacio ha recibido por hasta siete días tanto a familias de Centroamérica que ingresaron a Estados Unidos por las fronteras con Tamaulipas y que después fueron expulsadas de Estados Unidos bajo el llamado Título 42 por Ciudad Juárez, como a cientos de migrantes que han sido encontrados en casas de seguridad de traficantes de personas.

Rogelio Alejandro Pinal Castellanos, coordinador del albergue temporal y director de Derechos Humanos del Municipio, informó que los migrantes que arriban al sitio son atendidos con todas las medidas sanitarias, por lo que al ingresar se les aplica la prueba rápida de Covid-19, y en caso de salir positivos o contar con síntomas, son canalizados al hotel filtro, financiado por la Organización Internacional para las Migraciones de Naciones Unidas (OIM-ONU).

Quienes permanecen en el gimnasio son asistidos por personal de Derechos Humanos y de Centros Comunitarios, mientras que la alimentación es proporcionada por la Cocina Comunitaria de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Se trata de personas originarias de países como Honduras, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Ecuador, Brasil, Cuba, Venezuela e incluso algunas personas que se han desplazado de varios estados de México debido a la violencia, en su mayoría de Michoacán.

Los migrantes permanecen durante siete días en el gimnasio “Kiki” Romero, donde además del hospedaje reciben alimento y servicio médico, en coordinación con los gobiernos federal y estatal, destacó Pinal Castellanos.

Explicó que después de los siete días, los migrantes son transferidos al Centro Integrador para Migrantes Leona Vicario, pero antes se les aplica otra prueba de Covid-19, y en caso de salir positivos se canalizan al hotel filtro.

El gimnasio municipal “Kiki” Romero abrió sus puertas el 5 de abril y cerró el 19 de mayo, tras la atención de más de mil 467 migrantes, de los cuales más del 50 por ciento eran niños menores de ocho años, expulsados por el Gobierno de Joe Biden a esta frontera.

Su cierre temporal en mayo se debió a la falta de demanda de migrantes, pero el lugar permaneció habilitado para recibir a más personas en caso de ser necesario, por lo que el 9 de junio volvió a recibir a mexicanos y extranjeros tras el rescate por parte de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) de decenas de personas que permanecían en casas de seguridad en espera de los traficantes de personas los cruzaran a Estados Unidos.

Dijo que aunque ya habían pagado a los coyotes por ser trasladados hasta Estados Unidos, al llegar aquí los han mantenido encerrados hasta que sus familiares vuelven a depositarles cierta cantidad, pero lamentablemente los migrantes no lo ven como un secuestro, por lo cual al ser liberados no mencionan el delito, hasta que están en el albergue y narran sus casos.

El gimnasio se mantiene resguardado las 24 horas del día por policías municipales, para proteger tanto a los migrantes como a quienes cuidan de ellos. (Hérika Martínez Prado)

hmartinez@redaccion.diario.com.mx

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