Galope de bienestar físico y emocional

Desde hace más de un año el pequeño Rubén acude al Centro de Equinoterapia Santa Elena, donde recibe tratamiento luego de que fuera diagnosticado con síndrome nefrótico desde hace cuatro años.

“Tiene que recibir movimiento en sus riñoncitos y es por eso que nos recomendaron las equinoterapias, nos ha funcionado muy bien en la cuestión de confianza y de movimientos; le han ayudado mucho, aparte le ayuda en lo social y en los sentimientos”, mencionó Jessica Romero Durán, madre de Rubén, quien junto a su esposo, Rubén Zapata Vázquez, acuden al centro.

Fue hace cuatro años, que gracias al compromiso de un grupo de profesionistas certificados por la Fundación Internacional Ecuestre (FICAE) de Monterrey y encabezados por el director Apolinar Arredondo, surgió la idea para brindar estas equinoterapias en la Granja Santa Elena, a donde acuden desde menores hasta adultos con diferentes enfermedades o padecimientos, entre ellos personas con discapacidad visual, de sordera, autismo, o también a personas que presentan alguna situación socioemocional, afectiva, de conducta o algún trastorno.

“La equinoterapia es un complemento terapéutico de rehabilitación, que aprovecha los movimientos del caballo, para tratar diferentes afecciones; se fundamenta en el movimiento tridimensional del paso del caballo de 110 por minuto, se estimulan los cinco sentidos, el paso del caballo es similar al del ser humano, tiene una visión superior que le permite tener otra perspectiva, es un ser vivo que produce afecto, trasmite energía y respeto”, dijo la subdirectora del Centro de Equinoterapia Santa Elena, Raquel Barrón.

Beneficios

Detalló que con sesiones de alrededor de 30 minutos se pueden obtener grandes beneficios, ya que puede ayudar a resolver problemas emocionales, al manejo adecuado de impulsos agresivos, aumenta la confianza, la autoestima, fortalece la atención, concentración mental y la capacidad de adaptación, además, mejora el equilibrio, fortalece la musculatura, estimula la circulación, activa órganos internos y el corazón, entre otros beneficios.

Leonel Juárez, médico veterinario y especialista en fisioterapia, mencionó que la mayoría de los pacientes son infantes, por lo tanto si detectan nerviosismo o que están alterados, se les trata con diversos tipos de padecimientos antes de que se monten al caballo, y posteriormente ya cuando están tranquilos inicia la sesión de equinoterapia.

Caballos capacitados

Además, mencionó que es importante que los caballos también estén capacitados para brindar el apoyo a los pacientes con las terapias, “le enseñamos a dirigirse para irlo tranquilizando y darle confianza, tardamos alrededor de cuatro o seis meses para acondicionarlo y ahí vemos si es apto el animal y si no es apto mejor lo retiramos”, mencionó.

La subdirectora del Centro de Equinoterapia Santa Elena, invitó a la ciudadanía a que acuda a recibir estas terapias e hizo un llamado a todos aquellos que por amor a la profesión quieran unirse como auxiliares terapistas en apoyo a la comunidad. 

Para mayor información puede marcar al número de teléfono 656-562-1299.