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Juárez

Fallece el sacerdote Justo Jiménez

Fue el primer párroco en la Santísima Trinidad y San Judas Tadeo; murió ayer en España, su tierra natal

Luis Carlos Cano
El Diario de Juárez

viernes, 14 agosto 2020 | 11:19

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Ciudad Juárez.- El sacerdote Justo Jiménez, quien estuvo durante 30 años en esta frontera y fue el primer párroco en la Santísima Trinidad y San Judas Tadeo, falleció ayer jueves en España, su tierra natal a la edad de 93 años.

A través de su página en Facebook, la Diócesis Católica de Ciudad Juárez dio a conocer de la muerte del presbítero, quien se afirma, se ganó el corazón de muchos juarenses durante su estancia en la ciudad.

“Se nos acaba de informar que el padre Justo Jiménez, ha sido llamado a la Casa Eterna del Padre. Lo encomendamos a Dios. Ofrezcamos nuestras próximas eucarísticas por su eterno descanso”, expresa el informe de la Diócesis. 

De acuerdo a su biografía, el sacerdote Justo nació el 18 de octubre de 1927 en Olite, Navarra, España; ingresó en el seminario el 12 de septiembre de 1940 con los padres Dominicos de Villalva, en Navarra y se ordenó de sacerdote el 18 de octubre de 1953 en Palencia.

De 1960 a 1968 fue misionero del Celan en Argentina, Perú, Colombia, Ecuador, El Salvador y Guatemala, y en 1969 es enviado a México a la vicaría de la Santísima Trinidad, con los padres Dominicos.

De 1972 a 1978 fue primer párroco de la Santísima Trinidad, templo situado en la colonia Melchor Ocampo, además es nombrado superior de la Casa de los Dominicos en Ciudad Juárez.

El 5 de mayo de 1980 se le vincula de manera permanente a la Diócesis de Ciudad Juárez.

El 27 de octubre de 1985 se erige la parroquia de San Judas Tadeo y al padre Justo se le nombra como el primer párroco. En junio de 1998 termina la capilla de Todos los Santos, con una construcción tipo colonial.

Por motivos de salud, el 7 de febrero de 1999 renuncia como párroco y se regresa a su tierra natal, España, en donde en el 2003 cumplió su boda de oro sacerdotal.

Al conocer del fallecimiento del sacerdote, más de 300 juarenses expresaron sus comentarios por la relación con el padre Justo, además de que más de 800 respondieron con un like sobre la noticia.

Una de ellas fue Carmen Bermúdez, quien dice tener muy bellos recuerdos del sacerdote, ”le doy gracias a Dios porque mis hijos y yo formamos parte de su historia en San Judas Tadeo, mi hijo fue su lector y mi hija monaguillo, descanse en paz”.

Vicente Quiñones comenta: “claro que está en la presencia de Dios, un sacerdote que se entregó en cuerpo y alma, y además fue uno de los grandes pastores para sus feligreses, además para mí fue un gusto poder ser servidor en dos de sus grandes comunidades, la Santísima Trinidad, donde fui monaguillo en los años 1975-1979 y en San Judas Tadeo, participando en el coro y en otros ministerios.

Por su parte, Dolores Renova comenta “Dios lo tenga en su Santa Gloria, nunca se me olvidará, cuando recién llegado de España, comían o cenaban en mi casa con mis papás y que fue mi maestro para ser catequista cuando era párroco de la Santísima Trinidad.

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