Diario
Juárez
jueves, 25 julio 2019 | 06:00
Más de cinco mil niñas, niños y adolescentes, víctimas de la violencia, radican en Centros de Asistencia Social (CAS) y Centros de Atención Infantil (CAI), administrados y financiados por particulares, en su mayoría representantes de organizaciones religiosas.
Para el primer semestre se tiene un registro de 2 mil 866 niños y 2 mil 942 niñas que fueron acogidos en estos centros, luego de que fueron separados de su núcleo familiar a petición de la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, indican datos obtenidos a través de la Plataforma Nacional de Transparencia.
Estos espacios sólo son supervisados por el Sistema Estatal para el Desarrollo Integran de la Familia (DIF), ya que los recursos para su funcionamiento provienen, en su mayoría, de donativos, indican las organizaciones en sus plataformas y redes sociales.
La información oficial aportada por el DIF estatal menciona que sólo tiene a su cargo el CAS “Casa Cuna” que alberga a 59 infantes, mientras que los gobiernos municipales de Juárez y Delicias mantienen la Granja-Hogar DIF y la Casa Hogar, respectivamente.
Otros 750 menores son asistidos en 15 albergues rurales escolares habilitados por los Servicios Educativos del Estado de Chihuahua (SEECH) en los municipios Aldama, Chínipas, El Sauz, El Vergel, Guadalupe y Calvo, Janos, Julimes, Cárdenas, Madera, Maguarichi, Rosales, Sisoguichi, Tomochi, Uruachi y Valle de Zaragoza, informó personal de la Secretaría de Educación y Deporte.
Cada albergue aloja a 50 estudiantes, que son separados en dormitorios para hombres y mujeres, los cuales visitan su hogar sólo durante los fines de semana.
“Se brinda servicio de alimentación, hospedaje y apoyo en actividades académicas, a 750 niñas y niños, a fin de que puedan continuar y concluir de manera regular su educación primaria sin tener que salir de su comunidad”, informó personal de la SED.