Buscarán hoy alternativas para mexicanos en puentes

Con la presencia de aproximadamente mil mexicanos y la continua llegada de más personas a los puentes internacionales, el Consejo Estatal de Protección para la Atención y Protección a Migrantes se reunirá hoy en busca de soluciones para la atención a los connacionales.

“Una cosa es que efectivamente se les entienda como sujetos de protección internacional porque quieren solicitar protección en Estados Unidos, pero como Estado mexicano no podemos nada más voltearnos y darle la espalda a una situación que involucra a los tres órganos de gobierno”, comentó Enrique Valenzuela, coordinador general del Consejo Estatal de Población y Atención al Migrante (Coespo).

La reunión será presidida por el secretario general de Gobierno, Luis Fernando Mesa Soulé, en la cual se analizarán los diferentes fenómenos migratorios que presenta actualmente la ciudad, como la necesidad regularizar en México a los extranjeros que ya no quieren cruzar a Estados Unidos, y la atención a los mexicanos que permanecen en los puentes internacionales. 

Hasta ayer, el Coespo tenía registrada la llegada de 18 mil 871 migrantes en busca de asilo político en el vecino país, de los cuales 5 mil 982 se mantenían en espera de ser llamados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP), aunque no todos permanecen todavía en la ciudad, destacó Valenzuela.

Además, hasta el fin de semana la Cruz Roja tenía datos de la presencia de unas 144 personas en el puente Paso del Norte-Santa Fe, 450 en Zaragoza-Ysleta y 400 en el Córdova-Américas, 40 por ciento de ellos menores de edad. 

Una pareja que dijo cumplir ayer 16 días en el puente de la avenida Juárez con su hija de tres años de edad era hasta ayer la primera en la lista de dicho cruce, donde otras familias arribaron la misma mañana de ayer. 

La mayoría de los connacionales vienen huyendo de los grupos delictivos pertenecientes a los cárteles de las drogas de Zacatecas, Michoacán y Guerrero, pero también han llegado migrantes originarios de Guanajuato, Durango y Oaxaca, la mayoría con sus hijos menores de edad.

El éxodo de mexicanos comenzó en julio, según registros de Coespo, pero incrementó en agosto y llegó a su punto máximo en septiembre, con la permanencia de cientos de familias en los tres principales puentes fronterizos de la ciudad.

“No los podemos retirar por la fuerza, es un derecho que ellos tienen, a menos que hubiera alguna contingencia climática, pero por lo pronto no lo hay y estamos en el inter de que resuelvan las autoridades americanas”, dijo ayer el presidente municipal, Armando Cabada Alvídrez.

El arribo de un grupo de migrantes al cruce de Jerónimo-Santa Teresa provocó que agentes de CBP cerraran el cruce por aproximadamente de 15 minutos, lo que también movilizó a agentes de la Policía Federal y el Ejército Mexicano, quienes platicaron con los solicitantes de asilo político y los convencieron de retirarse del lugar, lo cual normalizó las operaciones en el puerto de entrada a Estados Unidos. 

(Hérika Martínez Prado)