PUBLICIDAD

Juárez

Buscan niños en las calles el sustento

Aumenta la cantidad de menores que la hacen de artistas urbanos en cruceros

Mayra Selene González
El Diario de Juárez

sábado, 04 diciembre 2021 | 14:04

Carlos Sánchez / El Diario de Juárez

PUBLICIDAD

Ciudad de Juárez.- Su corta edad y la peligrosidad del trabajo que realizan ha captado la atención de los juarenses. Durante las últimas semanas la cantidad de niños que trabajan en los cruceros como artistas urbanos ha incrementado notablemente, específicamente en octubre y noviembre, lo cual ha sido confirmado por organizaciones civiles y dependencias de gobierno.

La mayoría de los niños llegaron recientemente del estado de Chiapas y son pertenecientes a la etnia tzotzil, de acuerdo con lo que ellos mismos mencionaron a El Diario.

Todos ellos abandonaron la escuela y ahora, junto con su familia, buscan en esta frontera tener un sustento económico que en su lugar de origen ya no encontraron.

Ellas realizan malabares con pequeñas pelotas mientras el semáforo de la avenida Paseo de la Victoria y Ejército Nacional permanece en rojo.

Al prender la luz verde, entre ellas se cuidan para cruzar la avenida y ponerse a salvo en el camellón. Su madre trabaja en otro crucero sobre la avenida Ejército Nacional, cuadras más adelante, según mencionaron.

Originarias del estado de Chiapas, llegaron a Juárez hace unas dos semanas junto con sus padres y su hermanito menor. La migración a esta ciudad las hizo abandonar la escuela.

“No, allá en Chiapas sí íbamos pero aquí no, ya no hemos ido (a la escuela)”, comentó Ana. “Ya no quiero ir, es que yo cuando fui a la escuela no aprendí nada, por eso ya no quiero ir… es que en Chiapas no hay trabajo, por eso queremos trabajar aquí”, continuó.

Casos como el de Ana y Regina se observan en diferentes cruceros de la ciudad, algunos a lo largo del Paseo de la Victoria, Óscar Flores, Manuel J. Clouthier, Ejército Nacional y Malecón, entre otros.

Con estaturas de menos de un metro 20 centímetros y edades aparentes de entre los cinco y los 12 años, los menores realizan actividades como piruetas, maromas en el piso y malabares para después recorrer los carriles de vehículos a la espera de algunas monedas.

La solución no es sólo sacarlos de las calles: Red por la Infancia

Catalina Castillo, directora de Red por la Infancia, dijo que las comunidades a las que pertenecen las niñas y los niños que se observan en los cruceros, padecen de alta precariedad ya que incluso no cuentan con recursos pero consideró preocupante el que permanezcan solos ante la peligrosidad de las calles de esta ciudad.

“Se muestra la ausencia de la educación, de las escuelas que no están abiertas, creo que las escuelas siempre han sido un espacio de contención y un espacio seguro para las niñas y los niños”, mencionó.

La activista señaló que el incremento de los menores en las calles de la ciudad denota también la falta de políticas públicas en el cuidado infantil.

“Si revisamos las políticas públicas, a quienes se les está otorgando la mínima cantidad del cuidado infantil es a las familias, pero claro que las familias tienen otras necesidades más fuertes que el cuidado, en el programa federal del cuidado infantil, las becas son de 800 pesos por mes y te piden una serie de requisitos que a veces no tienen, la ausencia del cuidado infantil es en esta lógica porque también las escuelas hacen el cuidado infantil”, refirió.

Adrián Sánchez, vocero de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, dijo que en octubre fueron asegurados cinco menores que realizaban estas actividades y en noviembre 12, todos ellos fueron canalizados al Departamento de Trabajo Social debido a que realizaban trabajo bajo situaciones de riesgo o no dignas en cruceros.

El rango de edad de los menores asegurados durante estos dos meses es de uno a 17 años, refirió.

Todos los casos fueron puestos a disposición de la Subprocuraduría Auxiliar de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (NNA) para el Distrito Judicial Bravos.

Catalina Castillo consideró que más que sólo retirar a los niños de las calle es necesario la creación de políticas públicas a favor de sus familias.

“Cuando observo a las familias, a la mujer o al varón que está en la esquina y que el niño pequeño anda pidiendo, no saben el riesgo en que ponen a los niños y niñas, somos una ciudad con una impunidad y una corrupción que puedes cometer un delito y queda impune, entonces se pueden robar a esos niños y se desaparecen solamente”, expresó.

Lo anterior además de la vulnerabilidad para ser víctimas de un atropello, refirió. Castillo indicó que la primera responsabilidad es del DIF municipal, que debe realizar el acompañamiento a las familias y evitar que estén en los cruceros.

“Si tú platicas con ellos son personas que vienen del sur, son personas migrantes la mayoría, entonces la política de los tres niveles de gobierno en el tema de migrantes está fracasada”, destacó.

Consultado por El Diario, Jesús Vargas, coordinador de la Comisión Estatal para los Pueblos Indígenas (Coepi), confirmó que los menores que se observan recientemente trabajando en las calles provienen del estado de Chiapas y pertenecen a la etnia tzotzil, sin embargo, al igual que Castillo, destacó que el DIF municipal es la instancia que debe implementar programas de apoyo para evitar que permanezcan en riesgo.

El Diario solicitó al DIF municipal a través de su vocera, Perla Viridiana Márquez, la información sobre si existen programas de apoyo para los menores que trabajan en las calles, sin embargo no fue proporcionada.

PUBLICIDAD

ENLACES PATROCINADOS

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

close
search