Buscan en Juárez otra oportunidad

Ciudad Juárez.— Merline Joseph, Jeantilia Pierre y Jeanisé Durozin son tres migrantes haitianas que llegaron hace una semana a Ciudad Juárez con el objetivo de establecerse y darles un mejor futuro a sus hijos, por lo que pidieron el apoyo de la comunidad para conseguir un empleo. 

Merline tiene 29 años de edad y es enfermera, pero le piden que curse un año en México para poder ejercer su profesión en una institución; sin embargo, dijo que puede cuidar enfermos en casa, preparar comida caribeña, trabajar en la limpieza o realizar otras tareas; en 2017 tuvo que huir de su país con su hija de siete años y su hermana de 17, para ponerlas a salvo de la violencia.

“Yo quiero que mi hija estudie, mi hermana también quiere seguir estudiando, pero primero tenemos que establecernos, encontrar un trabajo”, dijo la técnico en enfermería, quien al llegar a México tuvo que esperar casi cuatro meses en Chiapas hasta obtener un permiso temporal para permanecer en el país, emitido por el Instituto Nacional de Migración (INM). 

Durante el tiempo que permaneció en el sur del país, vendía comida cubana, dominicana y haitiana, pero el dinero que reunió para continuar su viaje ya se le está acabando en el pago de un cuarto, por lo que le urge conseguir un empleo. 

“Yo vengo con la idea de conseguir una escuela para mi hija, trabajar y quedarme acá, mientras haya la posibilidad. Si no hay trabajo hay que partir para otro lado, porque yo quiero que mi hija estudie, ella es una chica superinteligente, en Chiapas estaba estudiando pero virtual”, narró la isleña. 

Jeantilia, de 35, y Jeanisé, de 34 años, también buscan un trabajo, pero ellas, además, buscan un lugar donde vivir con sus tres hijos de dos, cuatro y siete años. 

“Están durmiendo en el piso, en un espacio muy pequeño, y la persona ya les pidió el lugar. Ellas están buscando en cualquier lugar, en limpieza”, explicó Merline al traducir a ambas. 

Merline habla español, criollo y un poco de inglés; Jeantilia habla criollo y portugués, y Jeanisé, criollo y francés. 

Las tres pueden ser encontradas en la iglesia cristiana La Plenitud, ubicada en avenida Hermanos Escobar y República El Salvador, donde permanecen durante el día pero no pueden dormir, ya que el sitio está saturado con 34 migrantes haitianos, entre ellos 13 menores de edad, informó el pastor Arturo Ochoa.

“Vinimos a Juárez porque nos comentaron que acá había empleo, y lo que nos interesa es trabajar y tener un lugar estable, pero no nos hablaron de que la casa era difícil de conseguir”, lamentó la isleña, y pidió apoyo para sus compañeras, quienes necesitan ropa, cobijas, camas y una estufa para poder cocinar. 

Si usted quiere apoyarlas puede acudir al albergue, donde permanecen durante el día, o contactarse con el pastor al teléfono (656) 246-3998.

Según las estadísticas oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), con dos mil 679 detenciones, durante diciembre el cruce de migrantes haitianos por el Sector El Paso aumentó un 573 por ciento respecto a noviembre, convirtiéndose en la tercera nacionalidad de mayor flujo, sólo por debajo de los mexicanos y los guatemaltecos. 

De acuerdo con las cifras estadounidenses, de los tres mil 174 migrantes de Haití detenidos durante los últimos tres meses, 947 fueron expulsados bajo el llamado Título 42, una política sanitaria impuesta por el Gobierno de Donald Trump que argumenta en los migrantes un riesgo de Covid-19, por lo que otros, como Merline Joseph, Jeantilia Pierre y Jeanisé Durozin, han decidido quedarse en esta frontera en busca de un empleo.