Internacional
domingo, 25 agosto 2019 | 15:19
Biarritz.- El canciller iraní Mohamed Javad Zarif visitó el domingo la cumbre del G-7 sin previo aviso y se dirigió directamente al corazón de Biarritz, donde los líderes de las democracias más prósperas del mundo han estado debatiendo cómo hacer frente a las ambiciones nucleares de Teherán.
La invitación sorpresiva de Francia a Zarif representó una estrategia riesgosa del mandatario francés Emmanuel Macron, anfitrión de la reunión del Grupo de los Siete en esta ciudad turística en el litoral del Atlántico.
Zarif pasó unas cinco horas en Biarritz después de que su avión llegó al aeropuerto, el cual ha estado cerrado desde el viernes a todos los vuelos no relacionados con las delegaciones oficiales del G-7.