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Internacional
jueves, 07 mayo 2020 | 08:02
Las Naciones Unidas triplicaron el tamaño de su llamado de ayuda humanitaria este jueves, y así proteger a los países más vulnerables amenazados por la pandemia de coronavirus, de 2 mil millones, buscados inicialmente hace sólo seis semanas, a 6.7 mil millones de dólares ahora.
La enorme expansión del llamado, anunciada por Mark Lowcock, el principal funcionario de ayuda humanitaria de las Naciones Unidas, reflejó lo que describió como un plan global actualizado que incluye nueve países adicionales considerados especialmente vulnerables: Benin, Djibouti, Liberia, Mozambique, Pakistán, Filipinas, Sierra Leona, Togo y Zimbabwe.
Si bien no se espera el pico de la pandemia en los países más pobres hasta dentro de tres o seis meses, las Naciones Unidas dijeron en un comunicado que "ya hay evidencia de que los ingresos se desploman y los empleos desaparecen, los suministros de alimentos fallan y los precios se disparan, y niños que le faltan vacunas y comidas".
Lowcock declaró que "a menos que tomemos medidas ahora, debemos estar preparados para un aumento significativo en el conflicto, el hambre y la pobreza". El espectro de múltiples hambrunas se vislumbra.
Incluso cuando la organización de 193 miembros anunció el nuevo objetivo para la recaudación de fondos humanitarios, aún enfrentaba desafíos para cumplir la meta de 2 mil millones de dólares establecida por el Secretario General António Guterres el 25 de marzo. Se han recaudado alrededor de 1 mil millones nada más.
Las Naciones Unidas dijeron que ese dinero se destinó a la financiación de estaciones de lavado de manos en lugares vulnerables como los campos de refugiados, la distribución de guantes y máscaras y la capacitación de más de 1.7 millones de personas, incluidos trabajadores de la salud, en la identificación de virus y medidas de protección
La oficina de Lowcock proyectó recientemente que el costo a largo plazo de proteger al 10 por ciento de las personas más vulnerables del mundo de los peores impactos de la pandemia es de aproximadamente 90 mil millones de dólares. Esa cantidad es equivalente a aproximadamente el 1 por ciento de los paquetes de estímulos económicos actuales anunciados por los países más ricos del mundo.