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Internacional
miércoles, 26 febrero 2020 | 13:07
El gobierno chino desempolvó su antiguo libro de técnicas de propaganda mientras lucha contra el incesante brote de coronavirus, el mayor desafío para su legitimidad en décadas. Los medios estatales están llenando los medios con imágenes e historias de colaboración y sacrificio, destinadas a unir a las personas detrás del gobierno con sede en Beijing. Incluso, ofreció mascotas de dibujos animados, llamadas Jiangshan Jiao y Hongqi Man, para provocar sentimientos patrióticos entre los jóvenes durante la crisis.
El problema para los líderes de China es que, esta vez, no está funcionando muy bien.
En Internet, la gente critica abiertamente a los medios estatales. Han condenado las historias de sacrificios cuando el personal médico todavía carece de suministros básicos como cubrebocas. Han desacreditado las imágenes de mujeres con la cabeza rapada, preguntando si fueron presionadas para hacerlo y cuestionando que no aparezcan imágenes similares de hombres.
Daisy Zhao, de 23 años y residente de Beijing, dijo que alguna vez confió en los medios oficiales. Ahora se enfurece con los informes que tildaron de manifestantes a ocho médicos que advirtieron sobre la amenaza del coronavirus.
"Los medios oficiales", dijo Zhao, "han perdido mucha credibilidad".