Diario
Internacional
jueves, 17 octubre 2019 | 11:23
Ankara.- Altos funcionarios de la administración de Trump intentaron el jueves persuadir al presidente de Turquía de que aceptara un cese al fuego en el norte de Siria, una posición que ya había rechazado incluso antes de que el vicepresidente Mike Pence y el secretario de Estado Mike Pompeo partieran de Washington, ya que una ofensiva turca contra los combatientes kurdos, aliados de Estados Unidos, amenaza con reavivar la larga guerra civil en Siria.
Pence y Pompeo llegaron a Ankara, capital de Turquía, tras los informes de que el presidente Recep Tayyip Erdogan había lanzado la invasión después de que el presidente Trump le advirtiera en una carta que no actuara como un “brabucón: y que no fuera tonto.
En su camino hacia una reunión a mitad de la tarde con Erdogan, Pence y Pompeo ignoraron las preguntas de los periodistas sobre si la carta difcultaría sus labores diplomáticas en torno a un asunto ya de por sí se considera delicado.
La carta estaba fechada el 9 de octubre, el mismo día en que comenzó una operación militar turca contra combatientes kurdos sirios que se habían aliado con las tropas estadounidenses para luchar contra el Estado Islámico.
“¡Hagamos un buen trato!”, escribió Trump a Erdogan. “Usted no querrá ser el responsable de matar a miles de personas, y yo no quiero ser responsable de destruir la economía turca —y lo haré”.
“No actúe como un brabucón. ¡No sea tonto! ”, según concluye la carta de Trump.