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Internacional
lunes, 11 mayo 2020 | 10:22
Todos enfrentaron el delicado equilibrio de intentar reiniciar sus economías maltratadas sin causar una segunda ola de infecciones por coronavirus.
Los temores de picos de infección se han confirmado en los últimos días en Alemania, donde se vincularon nuevos grupos de infectados, y en Corea del Sur, donde un solo cliente de un club nocturno estaba vinculado a 85 casos nuevos.
Con la reapertura parcial de este lunes, los franceses no tuvieron que llevar formularios que les permitieran abandonar sus hogares. Se formaron multitudes en algunas estaciones de metro en París, uno de los puntos virales de Francia, pero los notorios atascos de la ciudad estaban ausentes y solo la mitad de las tiendas en los Campos Elíseos estaban abiertas.
En Alemania, los gimnasios reabrieron en el estado más poblado, pero las autoridades allí y en Francia advirtieron que un aumento en el número diario de infecciones podría conducir a nuevas restricciones.
En Corea del Sur, el gobierno controló con fuerza las nuevas infecciones, deteniendo las reaperturas escolares que se habían planeado para esta semana y volviendo a imponer restricciones a los clubes nocturnos y bares. Está tratando de rastrear a 5 mil 500 personas que visitaron un popular distrito de entretenimiento de Seúl mediante la verificación de transacciones con tarjetas de crédito, registros de teléfonos celulares y filmaciones de cámaras de seguridad.
En China, el Disneylandia de Shanghai reabrió sus puertas a los visitantes, pero dejó entrar solo un número limitado y exigió que usaran máscaras faciales y se les controlara la temperatura.
Aproximadamente la mitad de los 47 millones de españoles pasaron a una versión más suave del estricto confinamiento del país, comenzando a socializar, comprar en pequeñas tiendas y disfrutar de asientos al aire libre en restaurantes y bares. Sus ciudades más grandes, Madrid y Barcelona, permanecieron cerradas aunque el país informó el número más bajo de muertes e infecciones relacionadas con el coronavirus desde el 17 de marzo.
En Bélgica, el centro comercial City2 de Bruselas reabrió, y todos estaban impacientes por ver a sus clientes, ya que hicieron un tremendo trabajo para adaptar sus tiendas, crear caminos con entradas y salidas para los clientes.
En Gran Bretaña, el primer ministro Boris Johnson anunció una moderada reducción del cierre del país, pero instó a los ciudadanos a no desperdiciar el progreso realizado. Algunas personas, sin embargo, estaban confundidas cuando el gobierno cambió su eslogan de "Quedarse en casa" a "Quedarse alerta". Escocia, Gales e Irlanda del Norte se apegaron al viejo lema.
En Estados Unidos, los funcionarios de la administración Trump hablaron con optimismo sobre un control relativamente rápido de la pandemia, pero luego anunciaron que el vicepresidente Mike Pence se había puesto en cuarentena después de que un asistente dio positivo. El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, predijo que la economía estadounidense se recuperará en la segunda mitad de este año.
India informó su mayor aumento diario en casos de coronavirus este lunes mientras se preparaba para reanudar el servicio de trenes y aliviar los cierres que han afectado especialmente a los trabajadores migrantes y sus familias hambrientas.