Países cierran fronteras a medida que surgen más casos de Ómicron

Japón se unió este lunes a Israel y Marruecos para prohibir a todos los viajeros extranjeros, y Australia retrasó la reapertura de sus fronteras durante dos semanas, ya que más países se cerraron en respuesta a la nueva variante Ómicron del coronavirus.

El primer ministro japonés, Fumio Kishida, dijo que Japón revertiría una medida a principios de este mes para reabrir sus fronteras a los viajeros de negocios y estudiantes internacionales a corto plazo. Japón, la tercera economía más grande del mundo, ha estado cerrada a los turistas desde principios de la pandemia, una política que ha mantenido incluso cuando otras naciones ricas reabrieron a los visitantes vacunados.

Algunos países continuaron con sus planes de reabrir este lunes, como Singapur y Malasia, que abrieron su frontera terrestre. Corea del Sur, por otro lado, anunció que estaba retrasando cualquier flexibilización de las restricciones de distanciamiento social.

Australia dijo este lunes también que retrasaría dos semanas su plan para reabrir sus fronteras a estudiantes internacionales, migrantes calificados y viajeros de Japón y Corea del Sur. El país dijo que usaría el retraso, hasta el 15 de diciembre, para estudiar si la variante Ómicron es más peligrosa que la variante Delta, que recorrió todo el mundo a principios de este año.

Israel reabrió a los turistas vacunados hace solo cuatro semanas.

Horas después de que Israel anunciara su prohibición general durante el fin de semana, Marruecos dijo este domingo también que negaría la entrada a todos los viajeros, incluso a los ciudadanos marroquíes, durante dos semanas a partir del lunes. El país prohíbe todos los vuelos entrantes y salientes durante un período de dos semanas.

Las medidas de Japón, Israel y Marruecos contrastaron con las de lugares como Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y la Unión Europea, que han anunciado prohibiciones para los viajeros solo del sur de África.