Mientras EU intenta reducir las tensiones, Irán vuelve a jurar venganza

Un día después de que el presidente Trump se retirara de un nuevo conflicto militar con Irán, un comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica declaró que Irán pronto tomaría una “venganza más dura” contra Estados Unidos por un ataque con aviones no tripulados la semana pasada en el que murió a un general iraní de alto rango.

El comandante asesinado, el mayor general Qassim Suleimani, dirigió las Fuerzas Quds, una poderosa rama de la Guardia Revolucionaria, y su muerte reverberó en todo el país, lo que provocó amenazas de venganza y ataques de represalia por parte de Irán contra dos bases militares en Irak.

El aluvión de misiles del miércoles no cobró vidas estadounidenses, dijo Trump, y parecía haber infligido pocos daños en las bases aéreas de Al-Asad y Erbil que albergan a miles de militares iraquíes y estadounidenses. Y aunque Teherán dijo después que se habían tomado las “medidas adecuadas” para vengar el asesinato del general Suleimani, los funcionarios de la región advirtieron que Irán aún no no había abandonado su objetivo de expulsar a Estados Unidos del Medio Oriente.

Un comandante de alto rango de la Guardia Revolucionaria, Abdollah Araghi, dijo el jueves que las fuerzas armadas de Irán “impondrán una venganza más dura sobre el enemigo en un futuro no muy lejano”, según un informe traducido de la Agencia de Noticias Tasnim de Irán.

El presidente de Irán, Hassan Rouhani, habló con el primer ministro Boris Johnson de Gran Bretaña el jueves por la mañana y advirtió sobre nuevas medidas, según la oficina del presidente.

“Si Estados Unidos comete otro error, recibirá una peligrosa respuesta”, dijo Rouhani, según el comunicado.