Guatemala pone freno a caravana

Ciudad de México— La Policía Nacional Civil (PNC) de Guatemala reportó que entre el jueves y el mediodía de ayer fueron detenidos 227 migrantes, 217 hondureños y 10 salvadoreños que se dirigían a la frontera con México para intentar llegar dese ahí a Estados Unidos.

De acuerdo con la agencia Efe, fueron remitidos al Instituto Guatemalteco de Migración para gestionar el retorno a sus respectivos países.

Detalló que entre el grupo de migrantes se encontraban 41 menores de edad.

Fueron localizados, señaló, como resultado de los operativos que se realizan en siete departamentos del país centroamericano, donde el jueves fue impuesto un estado de prevención ante la posible llegada de una caravana migrante procedente de Honduras.

Los detenidos podrían formar parte de un grupo que salió en avanzada hace un par de días desde San Pedro Sula, aunque la Policía Nacional Civil no precisó más información al respecto.

Las autoridades migratorias también aseguraron a periodistas que al menos 600 hondureños que intentaban ingresar a Guatemala decidieron retornar voluntariamente a sus hogares.

El Gobierno de Guatemala mantuvo firme ayer su posición de no permitir el ingreso al territorio de la caravana.

Decenas de elementos del Ejército y de la Policía custodian la frontera de Guatemala con Honduras para impedir el paso de los migrantes, algunos de los cuales se encontraban ayer en Corinto, limítrofe con el departamento de Izabal.

El Instituto Nacional de Migración de Honduras reportó que 78 migrantes de ese país retornaron desde Guatemala.

Señaló que, por la frontera de Agua Caliente, departamento occidental de Ocotepeque, fronterizo con Guatemala, por donde salió una avanzada de la caravana, han retornado 36 inmigrantes, mientras que 38 lo hicieron por Corinto y cuatro por El Florido.

Arranque

La agencia Reuters reportó que alrededor de 2 mil hondureños partieron por la mañana de una terminal de autobuses de San Pedro Sula y enfilaron por carretera rumbo a la frontera con Guatemala.

Según indicaron testigos, la Policía hondureña solicitaba documentos de identidad en los retenes a los migrantes, que avanzaban subidos en camiones o autobuses. 

La noche del miércoles, un pequeño grupo de unas 300 personas ya había salido rumbo a Guatemala.

“Yo soy del campo Oro Verde y ahí el banano se perdió, se inundó todo y también las casas. No hay trabajo, por eso nos vamos esperando que en Estados Unidos encontremos trabajo”, comentó José López, uno de los integrantes de la caravana.