Urge EU a Taiwan compra de armas más adecuadas para enfrentar a China

Washington.— La administración Biden está presionando silenciosamente al gobierno taiwanés para adquirir armas de fabricación estadounidense que puedan ayudar a su pequeño ejército a repeler la invasión marítima de China en lugar de armas diseñadas para una guerra convencional, según dieron a conocer ex oficiales de Estados Unidos y de Taiwán.

La campaña que está haciendo Estados Unidos para cambiar las defensas de Taiwan ha incrementado su urgencia desde la invasión de Rusia a Ucrania ordenada a finales de febrero por el presidente Vladimir V. Putin.

La guerra ha convencido a Washington y a Taipei de que una invasión china a Taiwan en los próximos años es actualmente un riesgo posible —y que un ejército más pequeño con las armas adecuadas que adopte una estrategia de guerra asimétrica, en la que se enfoca en la movilidad y ataques de precisión, pueden derrotar a un rival más grande.

Oficiales estadounidenses están volviendo a examinar las capacidades del ejército taiwanés para determinar si pueden rechazar una invasión, como lo han estado haciendo las fuerzas ucranianas.

El presidente Tsai Ing-wen de Taiwan está tratando de orientar el ejército del país hacia una guerra asimétrica y tiene la intención de comprar un mayor número de armas móviles y letales que sean difíciles de convertirse en objetivos y de contrarrestar.

Sin embargo, algunos oficiales de la defensa taiwanesa se resisten. Oficiales de Estados Unidos han decidido que ciertas armas que el Ministerio de Defensa de Taiwan ha tratado de ordenar —el helicóptero Seahawk MH-60R fabricado por Lockheed Martin, por ejemplo— no son adecuadas para una guerra contra el ejército chino.

Oficiales de Estados Unidos han advertido a sus contrapartes taiwanesas que el Departamento de Estado podría rechazar esas propuestas. También les han dicho que los fabricantes de armas estadounidenses se abstendrían de solicitar que las agencias de Estados Unidos aprueben las órdenes de compra taiwanesas de ciertas armas.

Durante décadas, China, que tiene un régimen comunista, se comprometió a tomar bajo su dominio a Taiwan, una isla democrática con una independencia de facto que es socia de Estados Unidos.

Aunque no existe un indicio de que la guerra sea inminente, el presidente Xi Jinping de China ha adoptado una política exterior más agresiva que sus predecesores, oficiales de Estados Unidos temen que pueda invadir Taiwan para sellar su legado.