Tras enfrentar cargos Trump buscará la reivindicación en noviembre

Washington.- El presidente Trump conversó largamente con los periodistas en la Oficina Oval el jueves, un día después de que fuera acusado de severos delitos menores. El mandatario desestimó el juicio de la Cámara de Representantes y celebró el hecho de que un congresista demócrata había cambiado de partido para apoyarlo.

“No siento que me hayan destituido porque es un engaño, es una trampa”, insistió Trump mientras elogiaba al epresentante Jeff Van Drew, de Nueva Jersey, el recién acuñado republicano recién, y ofreció un vislumbre a futuro —más allá de su aparente absolución en un juicio ante el Senado— de las elecciones el próximo otoño.

“Les estoy ganando a todos por mucho”, dijo el presidente, “y creo que a eso es a lo que vamos”.

Para Trump, fue el primer día de su nueva realidad, el primer día en que despertó con la letra escarlata de la destitución marcada con tinta indeleble en los libros de historia. Pase lo que pase, ahora ingresa a la posteridad como el tercer presidente en enfrentar la destitución.

Pero salvo lo imprevisto, también será el primer presidente acusado que enfrenta la reelección, dando inicio a una campaña de 320 días para convencer a los votantes de que él tenía razón y que sus acusadores estaban equivocados. Tiene la oportunidad que Andrew Johnson y Bill Clinton nunca tuvieron, para mitigar, al menos, el estigma de la destitución, y su operación política no perdió tiempo al montar un contraataque dirigido a los demócratas, a quienes Trump califica de corruptos liberales que orquestaron una ofensiva partidista para anular su elección.