Termina racha de caídas de 99 días en precio de gasolina en EU

Washington.- Una racha de caídas de 99 días en el precio promedio nacional de la gasolina en Estados Unidos llegó a su fin este miércoles, una señal de que el efecto de la caída de los costos del combustible, que recientemente ayudó a moderar la inflación general, podría estar disminuyendo.

La caída hasta la fecha solo ha revertido en parte un aumento prolongado en los precios de la gasolina, que se aceleró después de la invasión rusa de Ucrania en febrero y continúa afectando a los consumidores. Qué hacer con la inflación impulsada por la energía también se ha convertido en un problema político para el presidente Biden y un desafío político para la Reserva Federal, que se espera que anuncie otro gran aumento de la tasa de interés este miércoles después de su reunión.

El precio promedio nacional de la gasolina subió siete décimas de un centavo a 3.68 dólares el galón este miércoles. Eso fue menos que los 3.90 dólares por galón de hace un mes, pero más que el 3.19 dólares en el mismo período del año pasado. Los precios de la gasolina alcanzaron un máximo de poco más de 5 dólares por galón en junio.

El precio de la gasolina en la bomba está determinado principalmente por los precios mundiales del petróleo. El petróleo crudo West Texas Intermediate, el punto de referencia de Estados Unidos, subió por encima de los 120 dólares por barril a mediados de junio y desde entonces se ha desplomado a unos 86 dólares por las preocupaciones de que una recesión afecte la demanda y las señales de que llegará al mercado un aumento de la oferta.

Si bien los precios de la gasolina en los Estados Unidos siguen siendo más altos de lo que eran durante varios años antes del aumento reciente, la caída a menos de 4 dólares por galón en agosto fue vista como una victoria política para Biden, quien ha estado bajo presión para controlar la inflación obstinadamente alta y ha liberado petróleo de las reservas estratégicas, instó a los países productores de petróleo a bombear más crudo y reprendió a las compañías petroleras por lo que él consideraba una especulación en los precios. El presidente y sus ayudantes han dado mucha importancia a la reciente caída en los precios de la gasolina, uno de los puntos brillantes del último informe de inflación, que mostró aumentos incómodamente rápidos en los precios de una variedad de otros bienes y servicios.