Diario
Estados Unidos
martes, 09 julio 2019 | 22:01
Washington— Los demócratas se centran cada vez más en convertir al líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, en un villano político, mientras intentan recuperar el control del Senado en las elecciones del próximo año y galvanizar la base liberal del partido, publicó The Washington Post.
Ese esfuerzo ganó un nuevo impulso el martes cuando Amy McGrath, una teniente coronel y piloto de combate de la Marina, anunció que desafiaría a McConnell (R-Ky.) Y lo culpó por convertir a Washington en "algo que despreciamos" en un video de campaña que atrajo a millones de vistas.
Mientras McGrath se enfrenta a una fuerte escalada contra McConnell en Kentucky rojo rubí, que el presidente Trump obtuvo en 30 puntos porcentuales en 2016, se espera que obtenga fondos importantes de los demócratas nacionales y proporcione al partido un oponente implacable y de alto perfil.
La entrada de McGrath se produce dos semanas después de que los demócratas lograron reclutar a la presidenta de la Cámara de Maine, Sara Gideon, para postularse contra la senadora Susan Collins (R). Gideon anticipó su campaña al poner a McConnell al frente y al centro en su video de anuncio, mostrando varios videos de él y criticando a Collins por trabajar con el líder del Partido Republicano y Trump para revisar el poder judicial y el código tributario federales.
"El líder de la mayoría tiene un poder extraordinario y es el principal obstáculo para que las cosas se hagan aquí en el Senado de los Estados Unidos", dijo el senador Richard Blumenthal (D-Conn.) En una entrevista el martes. "También es el rostro de la aquiescencia a Trump y la falta de una columna vertebral de los republicanos. Los argumentos más efectivos a menudo tienen que ver con una personalidad, un rostro personal y una historia, y esta historia tiene la gran virtud de ser verdad ".
Las últimas críticas reflejan un creciente movimiento dentro de las filas demócratas para hacer que el ciclo electoral de 2020 no sea solo un referéndum sobre Trump, sino también una purga de McConnell y de los republicanos atrincherados que han dado a los conservadores un inmenso dominio sobre las vacantes políticas y judiciales al tiempo que permiten las prioridades de Trump. Políticas de inmigración en línea en la frontera de EE. UU. y México para eliminar la desregulación.
Los republicanos tienen una mayoría de 53 a 47, y los demócratas ven oportunidades para reclamar al Senado con un presidente impopular en la parte superior del boleto y el Partido Republicano que defiende casi el doble de escaños. Pero un puñado de reclutas, como el ex líder legislativo estatal Stacey Abrams en Georgia, se han negado a postularse, y algunos candidatos presidenciales no han mostrado interés en abandonar la candidatura de la Casa Blanca para una campaña en el Senado.