Diario
Estados Unidos
lunes, 24 febrero 2020 | 16:44
Washington— Las políticas de migración del presidente Donald Trump -prohibiciones de viaje, restricciones de visa, límite de refugiados y cambios al asilo- han empezado a dar resultados de una meta a largo plazo: la inmigración legal ha caído más de 11 por ciento y una caída pronunciada se avecina.
Si bien el mandatario resalta la construcción de un muro fronterizo, es a través de modificaciones en las políticas y no las barreras físicas que la Administración de Trump ha podido cerrar EU.
Dos medidas más surtieron efecto el viernes y el lunes, una expansión de su prohibición de viaje y estrictos exámenes de riqueza para los solicitantes de la "green card" (tarjeta de residencia permanente).
"En una Administración que ha sido percibido como irregular, en cuanto a migración han sido extremadamente consistentes y van hacia adelante", dijo Sarah Pierce, una analista política con el Instituto de Política Migratoria, un grupo de investigación no partidaria.
El número de gente que obtuvo residencia permanente legal, además de refugiados que entraron en EU en años pasados, decayó de un millón 063 mil 289 en el año fiscal 2016, a 940 mil 877 en el año fiscal 2018, de acuerdo con un análisis de los datos del Gobierno por la Fundación Nacional para la Política Americana.
Cuatro años antes, la migración legal estaba en su nivel más alto desde 2006, cuando un millón 266 mil 129 personas obtuvieron residencia permanente legal en EU.
Aunque los datos proveen sólo un vistazo del efecto de la agenda de Trump, expertos en migración coincidieron en que son la primer señal y que las políticas venideras amplificaran sus consecuencias.
Un reporte publicado el lunes proyectó un declive del 30 por ciento en migración ilegal para 2021 y una baja del 35 por ciento en el crecimiento anual promedio de la fuerza laboral de EU.
Las puertas han sido bloqueadas de diferentes formas. Aquellos que escapan de la violencia o la persecución han encontrado reglas de asilo más duras y se han visto forzados a esperar en escuálidos campamentos en México o a ser enviados a países como Guatemala mientras sus casos son adjudicados.
La gente que ha languidecido en campamentos para personas desplazadas por años enfrenta un imposible límite de refugiados de 18 mil este año, más bajo que el de 110 mil que el Presidente Barack Obama fijó en 2016.
Familiares que esperaban viajar legamente desde Irán, Libia, Siria, Yemen y Somalia fueron bloqueados por la restricción de viaje del Presidente Trump.
El incremento en los vetos y en las entrevistas adicionales en persona han reducido aún más la cantidad de viajeros extranjeros.
El número de visas emitidas a extranjeros fuera del país que buscaban inmigrar a EU decayó casi 25 por ciento, de 617 mil 752 en 2016 a 462 mil 422 en el año fiscal 2019.