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Estados Unidos
jueves, 05 agosto 2021 | 11:09
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Es un esfuerzo que combina la política ambiental, económica y exterior en un intento de reformar una importante industria estadounidense. Además de sus preocupaciones sobre el cambio climático, a Biden le preocupa que Estados Unidos esté detrás de China en la fabricación de vehículos eléctricos. El presidente también ve oportunidades para generar empleos si la cadena de suministro nacional se reestructura y amplía para producir baterías y celdas de combustible en las fábricas estadounidenses.
Biden planea restaurar primero y fortalecer ligeramente los estándares de kilometraje de los automóviles a los niveles que existían bajo el presidente Barack Obama, pero que se debilitaron durante la administración de Trump. A continuación, su administración redactará un conjunto de reglas de contaminación de automóviles aún más estrictas para vehículos de pasajeros y camiones pesados que están diseñadas para aumentar las ventas de vehículos eléctricos.
"Cuando digo que los vehículos eléctricos son el futuro, no bromeo", escribió Biden en un tuit el miércoles por la noche. "Sintonicen las noticias mañana".
También firmará una orden ejecutiva que establece el objetivo de que la mitad de todos los vehículos vendidos en Estados Unidos sean eléctricos para 2030.
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