Presionan republicanos y demócratas a Biden por sanciones a Rusia

Nueva York.- Después de no actuar por sí mismos, algunos senadores exigen una acción rápida y severa por parte del presidente Biden para castigar la agresión rusa en Ucrania.

Los pedidos de sanciones paralizantes están cobrando fuerza en algunos sectores del Congreso, pero también lo hacen las difamaciones políticas. Quizás lo más revelador sea el silencio de los líderes republicanos y demócratas, que están divididos sobre la política de acción y por divisiones dentro de sus respectivos caucus.

Las demandas de acción de algunos legisladores de base son cada vez más estridentes.

“El momento de tomar medidas para imponer costos significativos al presidente Putin y al Kremlin comienza ahora”, declaró el senador Chris Coons, demócrata de Delaware y aliado clave del presidente.

El senador Jim Risch de Idaho, el principal republicano en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que la asistencia de seguridad a Ucrania debe aumentar ahora y exigió “sanciones fuertes e inmediatas”.

“Si esta administración desea tener una reacción fuerte y decisiva que impida un comportamiento aún más agresivo, debe seguir nuestro ejemplo: el mundo está mirando y se necesita una acción decisiva”, dijo Risch en un comunicado.

Un mes de esfuerzos clandestinos para unirse en torno a una legislación de sanciones severas quedó en nada antes de que el senado dejara Washington la semana pasada para un receso del Día de los Presidentes.

La cautela del Senado fue tipificada por la declaración emitida por el presidente del Comité de Relaciones Exteriores, Robert Menendez de Nueva Jersey, quien dijo este lunes por la noche: “Para ser claros, si más tropas rusas o fuerzas delegadas cruzan a Donbas, la administración de Biden y nuestros aliados europeos no deben dudar en imponer sanciones aplastantes. Debe haber costos tangibles, de gran alcance y sustanciales para Rusia en respuesta a este acto injustificado”.

El senador Charles E. Grassley, republicano de Iowa, aludió este martes al fracaso de los esfuerzos del Congreso para llegar a un consenso sobre las sanciones, sugiriendo que los legisladores perdieron la oportunidad de cambiar el comportamiento de Putin.