Estados Unidos

Pelean demócratas candidatura en debate

Una docena de aspirantes presidenciales se reunirán hoy, pero son tres los principales, Biden, Sanders y Warren

Associated Press

martes, 15 octubre 2019 | 07:11

Reforma

Ohio— Una docena de candidatos presidenciales demócratas se reunirán hoy para el debate presidencial más concurrido de la historia moderna.

Pero son los tres candidatos principales, Biden, Sanders y Warren, quienes se enfrentan al foco más intenso que podría exponer responsabilidades evidentes en su búsqueda de la Casa Blanca.

Joe Biden enfrenta acusaciones persistentes de irregularidades en el extranjero que podrían socavar su argumento de que está mejor posicionado para derrotar al presidente Trump.

Bernie Sanders se está recuperando de un ataque al corazón que generó dudas sobre su capacidad para aguantar el vigor de una campaña presidencial.

Y Elizabeth Warren está evitando un nuevo escrutinio de su vida.

Esta es la primera vez vez que los candidatos se reunirán desde que la Cámara de Representante avanzó con una investigación de juicio político contra el presidente.

Si bien están unidos en ese tema, el debate volverá a exponer a un partido político que lucha por unirse en torno a un mensaje unificado.

El evento, organizado por CNN y The New York Times, se llevará a cabo en Ohio, un estado que ha ayudado durante mucho tiempo a decidir las elecciones presidenciales, pero que se ha alejado de los demócratas en los últimos años.

Los aspirantes a la Casa Blanca representarán la diversidad política y personal que ha definido el Partido Demócrata de 2019: cuatro mujeres, cuatro personas de color, un hombre abiertamente homosexual y un rango de edad que abarca cuatro décadas.

Sanders, senador de Vermont, estará bajo presión para demostrar que tiene la resistencia física y mental para estar en un podio durante tres horas menos de dos semanas después de sufrir un ataque cardíaco.

La edad ya era una preocupación para el hombre de 78 años, incluso antes de ingresara a un hospital de Nevada a principios de este mes para atender una arteria obstruida en su corazón.

Sanders y sus aliados insisten en que el susto de salud solo ha fortalecido su compromiso con la elección del 2020 y su su plan de atención médica, "Medicare para todos''.

Sanders planea señalar, como lo ha hecho en los últimos días, que millones de estadounidenses sin seguro médico habrían ido a la bancarrota si hubieran estado en su lugar.

"Bernie es un corredor de maratón político'', dijo la confidente de Sanders, RoseAnn DeMoro, ex directora ejecutiva de National Nurses United.

"Creo que el debate será una gran tranquilidad para el público''.

También hay mucho en juego para Warren, la aliada ideológica de Sanders, que se halla en el escenario del debate por primera vez como líder, un situación que la convierte en el objetivo principal de sus rivales en ambos partidos políticos.

Biden, de 76 años, y otros más han centrado su atención en que las políticas liberales de Warren pueden ser difíciles de implementar con un Congreso dividido.

El alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg, ha destacado la ausencia de un plan de atención médica específico de Warren; argumenta que ella ha adaptado las ideas de Sanders.

Mientras tanto, los republicanos cuestionan si Warren, de 70 años, fue obligada a abandonar su trabajo de docente debido a un embarazo hace casi medio siglo, una afirmación que se ha convertido en la parte central de su mensaje personal.

Los críticos han señalado discursos y documentos pasados que sugieren que dejó el empleo por sí sola.

Warren respalda su historia.

El tema es particularmente amenazante porque no es la primera vez que la acusan de embellecer su biografía.

Warren, senadora de Massachusetts, ya se ha disculpado por reclamar la herencia de los nativos americanos hace décadas.

Si bien mostró que tenía una ascendencia tribal distante, también provocó una reprimenda por parte de algunos nativos americanos por atribuir la herencia tribal a la genética.

Biden no es ajeno a la presión de ser uno de los favoritos. Pero entra en su cuarto debate con el peso de la llamada en que Trump pidió a Ucrania que le investigaran, junto a su hijo, Hunter.

Trump ha dicho en repetidas ocasiones que Hunter Biden, de 49 años se benefició indebidamente de sus empleos en Ucrania y China, mientras que su padre era vicepresidente de Estados Unidos.

Trump también insiste en que Biden usó su poder para proteger a su hijo de las acusaciones de irregularidades.

No hay evidencia de ninguno de los reclamos, y algunos de los rivales demócratas lo han defendido de los ataques de Trump.

Pero es casi seguro que los moderadores del debate le pedirán que explique el asunto.

Hunter Biden participará en una serie de entrevistas en ABC en las horas previas al debate.

Biden abordó la situación durante el fin de semana, prometiendo prohibir a los miembros de la familia ocupar cualquier cargo dentro de la Casa Blanca si es elegido.

Mientras tanto, muchos otros candidatos luchan por su supervivencia política.

El debate también contará con Buttigieg, la senadora de California Kamala Harris, el empresario de Nueva York, Andrew Yang, el ex representante de Texas Beto O'Rourke.

Estarán también la senadora de Minnesota, Amy Klobuchar, el senador de Nueva Jersey, Cory Booker, el exsecretario de vivienda de Obama, Julian Castro, el activista multimillonario, Tom Steyer y el representante de Hawai, Tulsi Gabbard.

Con las asambleas de Iowa programadas para el 3 de febrero, el tiempo se agota rápidamente para que los candidatos de nivel inferior hagan un movimiento.

Según las encuestas actuales, varios no calificarían para la próxima ronda de debates.

Los riesgos ofrecen una razón convincente para que los aspirantes a la Casa Blanca sean más agresivos.

Buttigieg se ha peleado recientemente con O'Rourke por las armas, y durante el fin de semana señaló que planeaba hacer una distinción más clara entre él y Warren.

La atención médica surgió como un contraste clave entre los candidatos en los debates recientes y probablemente lo hará nuevamente, al menos según el Alcalde de 37 años, cuyo plan les daría a las personas la opción de unirse a un sistema de atención médica respaldado por el Gobierno o sus asegurador privados.

En declaraciones en un foro de candidatos presidenciales en Iowa, advirtió que algunos de sus competidores, sin nombrar explícitamente a Warren, no darían a los estadounidenses ninguna opción.

"No estoy presionando un Medicare para todos, sin importar si lo quieren o no'', dijo Buttigieg.

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